El Superclásico Boca-River se suspendió por lluvia
BUENOS AIRES -- Insólitamente mantenido en firme el inicio del Superclásico pese a la copiosa lluvia, el árbitro Héctor Baldassi suspendió el Boca-River tras sólo jugarse 8 minutos por el anegamiento de varios sectores del campo de La Bombonera.
Después de manejarse diversas alternativas, finalmente el encuentro se reanudará el jueves 25 de marzo, en horario a confirmar.
El cotejo, correspondiente a la 10ª fecha del Torneo Clausura, se completará dividido en dos tiempos de 41 minutos cada uno.
Sólo resta que los organismos de seguridad determinen el lunes a que hora se jugará el jueves el choque entre Boca Juniors y River Plate. El juego este domingo estaba 0-0 cuando fue suspendido por el árbitro Héctor Baldassi a los 8 minutos, debido a las condiciones en que se hallaba el terreno como consecuencia de una lluvia persistente.
El vicepresidente tercero de Boca, Juan Carlos Crespi, se apresuró en anunciar que el partido se completará el miércoles próximo a las 17, pero desde la misma Bombonera, el ministro del Interior, Florencio Randazzo, destacó lo poco conveniente de jugar ese día, 24 de marzo, cuando se conmemora el Día de la Memoria, al cumplirse 36 años del último golpe militar.
Con el correr de las horas, jugar el miércoles perdió fuerza y se confirmó la reanudación para el jueves.
Atrás quedaron las escasas jugadas en una Bombonera tan llena de público y de agua. Riquelme quería llevarla al pie y la pelota se le negaba como pocas veces a hacerle caso. Gaitán hubiera llegado mucho mejor en el único acercamiento al arco de River si no hubiera tanta agua en el trayecto hasta las manos del arquero Daniel Vega.
Baldassi, quien llegó a las 13.20 a la cancha, y recorrió el campo tempranamente, cuando una lluvia pareja caía sobre Buenos Aires y sin miras de parar. Habló con los periodistas en la previa y sin visos de suspenderlo cuando aún las tribunas estaban casi vacías.
Esperó hasta ver que los jugadores no podían llevar la pelota para pararlo.
"Hay gente que viene del interior, que hace un esfuerzo gran de para ver y por respeto a ellos quise ver si la cancha respondía, pero hubo tres pelotas que se jugaron y era imposible seguir", argumentó Baldassi.
Al menos la suspensión encontró a los hinchas dentro de La Bombonera y no en plena calle. Así, la desconcentración se hizo ordenadamente, al salir primero la parcialidad de River y más de media hora después la de Boca.
Después de manejarse diversas alternativas, finalmente el encuentro se reanudará el jueves 25 de marzo, en horario a confirmar.
El cotejo, correspondiente a la 10ª fecha del Torneo Clausura, se completará dividido en dos tiempos de 41 minutos cada uno.
Sólo resta que los organismos de seguridad determinen el lunes a que hora se jugará el jueves el choque entre Boca Juniors y River Plate. El juego este domingo estaba 0-0 cuando fue suspendido por el árbitro Héctor Baldassi a los 8 minutos, debido a las condiciones en que se hallaba el terreno como consecuencia de una lluvia persistente.
El vicepresidente tercero de Boca, Juan Carlos Crespi, se apresuró en anunciar que el partido se completará el miércoles próximo a las 17, pero desde la misma Bombonera, el ministro del Interior, Florencio Randazzo, destacó lo poco conveniente de jugar ese día, 24 de marzo, cuando se conmemora el Día de la Memoria, al cumplirse 36 años del último golpe militar.
Con el correr de las horas, jugar el miércoles perdió fuerza y se confirmó la reanudación para el jueves.
Atrás quedaron las escasas jugadas en una Bombonera tan llena de público y de agua. Riquelme quería llevarla al pie y la pelota se le negaba como pocas veces a hacerle caso. Gaitán hubiera llegado mucho mejor en el único acercamiento al arco de River si no hubiera tanta agua en el trayecto hasta las manos del arquero Daniel Vega.
Baldassi, quien llegó a las 13.20 a la cancha, y recorrió el campo tempranamente, cuando una lluvia pareja caía sobre Buenos Aires y sin miras de parar. Habló con los periodistas en la previa y sin visos de suspenderlo cuando aún las tribunas estaban casi vacías.
Esperó hasta ver que los jugadores no podían llevar la pelota para pararlo.
"Hay gente que viene del interior, que hace un esfuerzo gran de para ver y por respeto a ellos quise ver si la cancha respondía, pero hubo tres pelotas que se jugaron y era imposible seguir", argumentó Baldassi.
Al menos la suspensión encontró a los hinchas dentro de La Bombonera y no en plena calle. Así, la desconcentración se hizo ordenadamente, al salir primero la parcialidad de River y más de media hora después la de Boca.
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