viernes, 26 de marzo de 2010

Pasión y duelos latinos en Real-Aleti


MADRID -- Roberto Carlos decía que un clásico es como la final de un Mundial en cuanto a interés y exigencia, mientras Maxi Rodríguez sostenía que son partidos sin favoritos y sin pronóstico fijo, ya que el último puede ganar al primero.
Diego Pablo Simeone, jugador aguerrido donde los haya, afirmaba que son encuentros en los que "siempre se siente algo particular" y Alfredo Di Stéfano recordaba que "acá en Madrid nos las agarrábamos serias con el Atlético".
Es el clásico de Madrid, el partido de máxima rivalidad entre el Real y el Atlético, uno de los grandes momentos de la historia del fútbol español y mundial. La cita es el próximo domingo en el Santiago Bernabéu a las 21.00 horas.
Pese a que hay una jornada de Liga intermedia (la 28), toda la atención del Real y del Atlético está puesta en el Bernabéu, con el permiso de sus rivales del jueves, el Getafe y el Athletic de Bilbao, respectivamente.
Aquí la pasión se adueña de todo, es "difícil de esconder", dijo en una ocasión Adelardo Rodríguez, jugador del Atlético de Madrid de 1959 a 1976, el rojiblanco que más derbis ha disputado, con 27.
Si se habla de pasión, de garra y entusiasmo, los latinos siempre dar un paso al frente.
En esta temporada, están a disposición de los entrenadores, el chileno Manuel Pellegrini por el Madrid y Quique Flores por el Atlético, un total de 12 jugadores latinos.
Los del Madrid son los argentinos Ezquiel Garay, Fernando Gago y Gonzalo Higuaín y los brasileños Kaka, que está lesionado, y Marcelo Vieira; los del Atlético son los argentinos Sergio "Kun" Agüero, Eduardo Salvio y Mariano Pernía (internacional por España), el colombiano Luis Perea, los uruguayos Diego Forlán y Leandro Cabrera y el brasileño Paulo Assunçao.
En el Madrid también milita el defensa central Pepe, de origen brasileño pero internacional por Portugal, que será, junto con Kaká, el gran ausente del clásico, por lesión, como lo fue en el del pasado año (08/03/2009) por la misma razón.
Si sus entrenadores cuentan con ellos, uno de los duelos más atractivos del derbi del domingo será el fraternal entre el defensa central blanco Garay y el delantero rojiblanco Agüero, ya que ambos vienen rindiendo a un alto nivel.
Garay ha superado con sobresaliente la difícil tarea de relevar a Pepe en los partido en que Pellegrini contó con sus servicios, mientras Agüero es un pilar en el "Atleti", ese tipo de delantero que marca la diferencia.
El "10" rojiblanco está en un buen momento de forma. La pasada semana, dos goles suyos en la eliminatoria contra el Sporting de Lisboa condujeron al Atlético a los cuartos de la Liga Europa y, con 16 dianas, se colocó como tercer anotador rojiblanco en la historia europea del club, por detrás de Luis Aragonés, con 27, y del angoleño Mendonça.
Agüero, de 21 años, suma 9 goles en la Liga, cuatro menos que su compañero de ataque, el uruguayo Diego Forlán, de 30 años, una pareja temible cuando ambos alcanzan su plenitud.
La capacidad goleadora latina domina la Liga española. El argentino Leo Messi es el máximo artillero, con 25 dianas, y le sigue su compatriota Higuaín, con 22.
"El Pipita", de 22 años, será una de las grandes preocupaciones de la defensa rojiblanca -la otra es el portugués Cristiano Ronaldo-, ya que se ha convertido en el arma ofensiva blanca más letal en la Liga, con cinco de ventaja sobre la mediática estrella lusa.
La cifra de 22 que alcanzó en la pasada jornada es la misma que firmó en toda la pasada campaña liguera, en la que añadió dos tantos en la Copa del Rey. Si mantiene el promedio actual (lleva 22 en 22 partidos) puede finalizar la temporada con 38.
Higuaín quiere ir paso a paso y su objetivo es superar el total de 24 dianas de la pasada temporada. "Me faltan dos goles más para superar los que marqué el año pasado. Ése es mi objetivo,y que cumplirlo sirva para ganar el título" dijo el martes.
De los jugadores latinos, sin duda hay uno que espera con ilusión y ansia que Quique cuente con él. Se trata de la nueva perla argentina del Atlético de Madrid, "Toto" Salvio, que, a sus 19 años, sueña con revivir las sensaciones especiales de jugar un derbi.

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