Flamengo superó a Caracas y espera por su futuro copero
RIO DE JANEIRO (EFE) -- El Flamengo consiguió una ajustada victoria de 3-2 en un partido intenso con el Caracas, en la última jornada del Grupo 8 de la Copa Santander Libertadores, resultado que, a pesar de favorable, lo deja en la lista de espera para saber si avanza o no a los octavos de final.
La victoria dejó al Flamengo como segundo del Grupo 8, con 10 puntos, pero tendrá que esperar combinaciones de resultados de otros grupos para saber si pasará a los octavos como uno de los seis mejores segundos.
Los venezolanos vendieron cara la derrota y se fueron del estadio Maracaná con la satisfacción de haber jugado sin complejos con uno de los grandes de Río de Janeiro y con el recuerdo de un hermoso gol anotado por Jesús Gómez.
El Flamengo comenzó el partido con más disposición para el ataque por la urgencia de ganar para clasificarse como uno de los mejores seis segundos, pero chocó con la marcación firme y limpia del Caracas en el medio del campo, que obligó a los brasileños a explorar el juego por las bandas.
La visita, sin nada que perder, no se resignó a contener el balón en el medio del campo sino que jugó al pelotazo y sorprendió a los dueños de casa al ponerse en ventaja a los 14 minutos con una anotación de Rafael Castellín, que silenció el estadio Maracaná.
El gol que hizo pensar a los venezolanos en una hazaña en el templo del fútbol nació en el lanzamiento de un tiro de esquina desde la derecha, tras lo cual Alejandro Cichero devolvió el balón en el segundo palo y Castellín empujó para el fondo de la red de Bruno.
La alegría del Caracas fue efímera porque tres minutos después, a los 17, Ronaldo Angelim marcó de cabeza el gol del empate tras un tiro de esquina con una cierta complicidad del arquero Toyo que, adelantado unos pasos, se quedó corto en su salto.
Casi enseguida, a los 19, Michael puso en ventaja al Flamengo al anotar con un disparo rasante el segundo de los locales después de recibir de Adriano el balón desde la izquierda.
Sin embargo, el rendimiento que parecía abrir camino a la goleada que necesitaba el Flamengo para clasificarse a la siguiente ronda de los Libertadores no se produjo a pesar del fuerte ritmo de ataque que imprimió el campeón brasileño, principalmente con Leo Moura que hizo de las suyas desde la derecha.
El equipo venezolano no se quedó atrás y el trío formado el argentino Figueroa, el colombiano Valoyes y por Gómez, que había entrado en el minuto 40 en sustitución del lesionado César González, llevó permanentemente zozobra al arco de Bruno.
El Flamengo, superior en técnica y táctica, tuvo más tiempo el balón, pero el conjunto venezolano nunca se resignó a defenderse y fue esa persistencia la que le permitió callar el Maracaná por segunda vez a los 67 minutos con el gol de Gómez.
El atacante del Caracas recibió el balón en mitad del campo, lo atravesó todo por la izquierda, pasó por tres defensores del Flamengo y, ya casi sobre la línea de fondo, lanzó el balón hacia el arco de Bruno con una curva que parecía imposible pero que dejó al arquero boquiabierto.
Con el 2-2 cundió el desespero en el Flamengo y fue a partir de ese momento en que más aparecieron sus atacantes Vágner Love y Adriano, quienes a pesar de las llegadas constantes, pasaron la noche en blanco, en parte por las oportunas defensas del arquero caraqueño.
El gol de la victoria fue anotado por David, a los 76 minutos, mediante un toque suave con el pie izquierdo tras recibir un centro de Leo Moura.
Este partido de la jornada de cierre del Grupo 8 de la Copa Libertadores se jugó en el estadio Maracaná.
La victoria dejó al Flamengo como segundo del Grupo 8, con 10 puntos, pero tendrá que esperar combinaciones de resultados de otros grupos para saber si pasará a los octavos como uno de los seis mejores segundos.
Los venezolanos vendieron cara la derrota y se fueron del estadio Maracaná con la satisfacción de haber jugado sin complejos con uno de los grandes de Río de Janeiro y con el recuerdo de un hermoso gol anotado por Jesús Gómez.
El Flamengo comenzó el partido con más disposición para el ataque por la urgencia de ganar para clasificarse como uno de los mejores seis segundos, pero chocó con la marcación firme y limpia del Caracas en el medio del campo, que obligó a los brasileños a explorar el juego por las bandas.
La visita, sin nada que perder, no se resignó a contener el balón en el medio del campo sino que jugó al pelotazo y sorprendió a los dueños de casa al ponerse en ventaja a los 14 minutos con una anotación de Rafael Castellín, que silenció el estadio Maracaná.
El gol que hizo pensar a los venezolanos en una hazaña en el templo del fútbol nació en el lanzamiento de un tiro de esquina desde la derecha, tras lo cual Alejandro Cichero devolvió el balón en el segundo palo y Castellín empujó para el fondo de la red de Bruno.
La alegría del Caracas fue efímera porque tres minutos después, a los 17, Ronaldo Angelim marcó de cabeza el gol del empate tras un tiro de esquina con una cierta complicidad del arquero Toyo que, adelantado unos pasos, se quedó corto en su salto.
Casi enseguida, a los 19, Michael puso en ventaja al Flamengo al anotar con un disparo rasante el segundo de los locales después de recibir de Adriano el balón desde la izquierda.
Sin embargo, el rendimiento que parecía abrir camino a la goleada que necesitaba el Flamengo para clasificarse a la siguiente ronda de los Libertadores no se produjo a pesar del fuerte ritmo de ataque que imprimió el campeón brasileño, principalmente con Leo Moura que hizo de las suyas desde la derecha.
El equipo venezolano no se quedó atrás y el trío formado el argentino Figueroa, el colombiano Valoyes y por Gómez, que había entrado en el minuto 40 en sustitución del lesionado César González, llevó permanentemente zozobra al arco de Bruno.
El Flamengo, superior en técnica y táctica, tuvo más tiempo el balón, pero el conjunto venezolano nunca se resignó a defenderse y fue esa persistencia la que le permitió callar el Maracaná por segunda vez a los 67 minutos con el gol de Gómez.
El atacante del Caracas recibió el balón en mitad del campo, lo atravesó todo por la izquierda, pasó por tres defensores del Flamengo y, ya casi sobre la línea de fondo, lanzó el balón hacia el arco de Bruno con una curva que parecía imposible pero que dejó al arquero boquiabierto.
Con el 2-2 cundió el desespero en el Flamengo y fue a partir de ese momento en que más aparecieron sus atacantes Vágner Love y Adriano, quienes a pesar de las llegadas constantes, pasaron la noche en blanco, en parte por las oportunas defensas del arquero caraqueño.
El gol de la victoria fue anotado por David, a los 76 minutos, mediante un toque suave con el pie izquierdo tras recibir un centro de Leo Moura.
Este partido de la jornada de cierre del Grupo 8 de la Copa Libertadores se jugó en el estadio Maracaná.
São Paulo 1 - 0 Once Caldas
Sao Paulo venció a Once Caldas y le arrebató el liderazgo
SAO PAULO (EFE) -- El Sao Paulo se impuso 1-0 al Once Caldas en la última jornada del Grupo 2 de la Copa Santander Libertadores, se hizo de un boleto directo a la siguiente fase y le arrebató el primer lugar a los colombianos, que aún así avanzan a octavos de final entre los mejores segundos del torneo.
El equipo brasileño precisaba la victoria para asegurar la clasificación y la encontró con un gol de Fernandinho, en el minuto 40. Así sigue en carrera y se ilusiona con vistas a los octavos.
Sao Paulo presionó con fuerza en los primeros diez minutos, aunque sin conseguir llevar peligro al arco de Martínez.
Dagoberto y Fernandinho intentaron hilvanar jugadas, pero la defensa del Once Caldas se mostró solvente, bien auxiliada por sus volantes, que reforzaban el cerrojo montado por el entrenador Juan Carlos Osorio.
Pese al empuje del Sao Paulo, el primer gran susto del partido lo dio el colombiano Dayro Montero, con un cabezazo que envío el balón apenas desviado, ante la mirada impotente de Rogerio Ceni.
El equipo brasileño no se amilanó y mantuvo la presión, con el lateral Cicinho desprendido, sumándose al ataque y hasta ayudando a Hernanes en la labor creativa.
Ese despliegue ofensivo empezó a dar frutos y Hernanes tuvo la primera gran oportunidad del Sao Paulo, con un tiro libre que obligó a Martínez a una gran estirada para evitar el gol.
Sin embargo, la respuesta del Once Caldas fue inmediata, con un contraataque en alta velocidad en el que Danny Santoya casi puso en ventaja a los colombianos.
El esfuerzo del Sao Paulo finalmente tuvo premio en el minuto 40, cuando Marlos encaró a un defensor y al arquero Martínez, los dejó en el camino y quedó sin ángulo, pero tocó para Fernandinho, que anotó con un fuerte remate.
En la segunda etapa, el conjunto brasileño volvió al campo con intenciones claras de ampliar su ventaja, pero encontró a un Once Caldas mucho más agresivo, que a poco estuvo de empatar por medio de Castrillón, que estrelló un balón en un poste de un cabezazo.
El Once Caldas se mantuvo incisivo, pero chocó una y otra vez con la defensa del Sao Paulo, bien plantada.
El partido fue perdiendo ritmo y en los tramos finales los dos equipos parecieron conformarse con un resultado que no hacía mucho daño a ninguno, ya que tanto uno como otro han garantizado su pase a los octavos de final del torneo.
Este partido de la última jornada del Grupo 2 de la Copa Libertadores se disputó en el estadio Morumbí, de Sao Paulo, ante 25.000 espectadores.
El equipo brasileño precisaba la victoria para asegurar la clasificación y la encontró con un gol de Fernandinho, en el minuto 40. Así sigue en carrera y se ilusiona con vistas a los octavos.
Sao Paulo presionó con fuerza en los primeros diez minutos, aunque sin conseguir llevar peligro al arco de Martínez.
Dagoberto y Fernandinho intentaron hilvanar jugadas, pero la defensa del Once Caldas se mostró solvente, bien auxiliada por sus volantes, que reforzaban el cerrojo montado por el entrenador Juan Carlos Osorio.
Pese al empuje del Sao Paulo, el primer gran susto del partido lo dio el colombiano Dayro Montero, con un cabezazo que envío el balón apenas desviado, ante la mirada impotente de Rogerio Ceni.
El equipo brasileño no se amilanó y mantuvo la presión, con el lateral Cicinho desprendido, sumándose al ataque y hasta ayudando a Hernanes en la labor creativa.
Ese despliegue ofensivo empezó a dar frutos y Hernanes tuvo la primera gran oportunidad del Sao Paulo, con un tiro libre que obligó a Martínez a una gran estirada para evitar el gol.
Sin embargo, la respuesta del Once Caldas fue inmediata, con un contraataque en alta velocidad en el que Danny Santoya casi puso en ventaja a los colombianos.
El esfuerzo del Sao Paulo finalmente tuvo premio en el minuto 40, cuando Marlos encaró a un defensor y al arquero Martínez, los dejó en el camino y quedó sin ángulo, pero tocó para Fernandinho, que anotó con un fuerte remate.
En la segunda etapa, el conjunto brasileño volvió al campo con intenciones claras de ampliar su ventaja, pero encontró a un Once Caldas mucho más agresivo, que a poco estuvo de empatar por medio de Castrillón, que estrelló un balón en un poste de un cabezazo.
El Once Caldas se mantuvo incisivo, pero chocó una y otra vez con la defensa del Sao Paulo, bien plantada.
El partido fue perdiendo ritmo y en los tramos finales los dos equipos parecieron conformarse con un resultado que no hacía mucho daño a ninguno, ya que tanto uno como otro han garantizado su pase a los octavos de final del torneo.
Este partido de la última jornada del Grupo 2 de la Copa Libertadores se disputó en el estadio Morumbí, de Sao Paulo, ante 25.000 espectadores.
Universidad de Chile 0 - 0 Universidad Católica
U. de Chile se clasificó como líder y la Católica dijo adiós
SANTIAGO DE CHILE (EFE) -- La Universidad de Chile igualó sin goles con la Universidad Católica en la última jornada del Grupo 8 de la Copa Santander Libertadores, que lo dejó como líder con 12 puntos y a la espera de rival en los octavos de final, mientras que su adversario no logró el milagro y se despidió.
La Universidad Católica quedó relegada y sin ninguna opción en el tercer puesto, con siete puntos, a tres del Flamengo, que no tiene seguro su paso a la tercera fase y espera por otros resultados, ya que este año sólo avanzarán a octavos los seis mejores segundos y no los ocho, como pasaba antes.
En tanto, la Universidad de Chile ganó el Grupo 8, con 12 unidades, seguida del Flamengo con 10, Universidad Católica con siete y Caracas con dos.
En un discreto partido, ambos equipos universitarios no se hicieron daño, aunque en el segundo tiempo fue más técnico, dinámico y generoso en oportunidades de gol.
Los primeros diez minutos fueron para el conjunto de la Universidad Católica que permanentemente buscó el arco azul, defendido por el internacional Miguel Pinto.
En los siguientes minutos, la Universidad de Chile se adueñó del balón y Álvaro Fernández y Marcelo Díaz, respectivamente, hicieron pasar susto al arquero Paulo Garcés.
Posteriormente, Gabriel Vargas desde unos veinticinco metros intentó nuevamente abrir el marcador para el equipo azul dirigido por Gerardo Pelusso, pero Garcés anuló toda oportunidad.
En los siguientes minutos, algunos ataques hilvanados por Damián Díaz y Milovan Mirosevic, dieron la sensación de que la Universidad Católica volvía tomar el control de las acciones.
Igualmente, fueron los jugadores azules que comenzaron a copar todos los espacios de la cancha del Monumental, pese a estar jugando con varios suplentes.
En el segundo tiempo, la Universidad Católica, con dos hombres frescos en sus filas, entró con una disposición más ofensiva y en varias oportunidades creó verdadero peligro para los tres palos defendidos por Pinto.
Por momentos, Milovan Mirosevic, Francisco Silva y Damián Díaz hicieron zozobrar a la defensa azul, pero el arquero Miguel Pinto estuvo impecable en su accionar.
Este clásico chileno, correspondiente a la última jornada del Grupo 8 de la Copa Libertadores, se jugó en el Estadio Monumental David Arellano, de Santiago de Chile, antes 14.000 espectadores.
La Universidad Católica quedó relegada y sin ninguna opción en el tercer puesto, con siete puntos, a tres del Flamengo, que no tiene seguro su paso a la tercera fase y espera por otros resultados, ya que este año sólo avanzarán a octavos los seis mejores segundos y no los ocho, como pasaba antes.
En tanto, la Universidad de Chile ganó el Grupo 8, con 12 unidades, seguida del Flamengo con 10, Universidad Católica con siete y Caracas con dos.
En un discreto partido, ambos equipos universitarios no se hicieron daño, aunque en el segundo tiempo fue más técnico, dinámico y generoso en oportunidades de gol.
Los primeros diez minutos fueron para el conjunto de la Universidad Católica que permanentemente buscó el arco azul, defendido por el internacional Miguel Pinto.
En los siguientes minutos, la Universidad de Chile se adueñó del balón y Álvaro Fernández y Marcelo Díaz, respectivamente, hicieron pasar susto al arquero Paulo Garcés.
Posteriormente, Gabriel Vargas desde unos veinticinco metros intentó nuevamente abrir el marcador para el equipo azul dirigido por Gerardo Pelusso, pero Garcés anuló toda oportunidad.
En los siguientes minutos, algunos ataques hilvanados por Damián Díaz y Milovan Mirosevic, dieron la sensación de que la Universidad Católica volvía tomar el control de las acciones.
Igualmente, fueron los jugadores azules que comenzaron a copar todos los espacios de la cancha del Monumental, pese a estar jugando con varios suplentes.
En el segundo tiempo, la Universidad Católica, con dos hombres frescos en sus filas, entró con una disposición más ofensiva y en varias oportunidades creó verdadero peligro para los tres palos defendidos por Pinto.
Por momentos, Milovan Mirosevic, Francisco Silva y Damián Díaz hicieron zozobrar a la defensa azul, pero el arquero Miguel Pinto estuvo impecable en su accionar.
Este clásico chileno, correspondiente a la última jornada del Grupo 8 de la Copa Libertadores, se jugó en el Estadio Monumental David Arellano, de Santiago de Chile, antes 14.000 espectadores.
Banfield 4 - 1 Club Deportivo Cuenca
Banfield goleó a Deportivo Cuenca y sacó pasaje a los octavos
BUENOS AIRES (EFE) -- Banfield, actual campeón del fútbol argentino, se clasificó para los octavos de final de la Copa Santander Libertadores tras golear 4-1 al ya eliminado ecuatoriano Deportivo Cuenca, en el cierre del Grupo 6 del torneo.
El equipo del Sur del Gran Buenos Aires obtuvo la victoria en la segunda parte de un partido que tenía complicado en los primeros 45 minutos por su propia inoperancia, pese a la necesidad de lograr los tres puntos para continuar en la máxima competición continental.
Banfield finalizó segundo en el Grupo 6, con 11 puntos, y quedó a sólo una unidad del líder, Nacional, que a su vez venció por 2-0 en Montevideo al otro equipo que también ya había sido eliminado, el Monarcas Morelia mexicano.
Una jugada del colombiano James Rodríguez y un tiro libre del uruguayo Matías Cardaccio rompieron la monotonía del ataque de Banfield para que Rubén Ramírez anotara dos veces de cabeza, amplió Walter Erviti tras una jugada personal y coronó la goleada el arquero Cristian Lucchetti, de penal.
El gol de Gabriel Méndez, a los 71 minutos, fue el único del conjunto visitante, que con lo mínimo indispensable se las arregló en la primera parte para planchar el partido, mantener el juego lejos de su área y cuidar hasta donde podía la posesión de la pelota frente a un Banfield desconectado.
Erviti y el colombiano Rodríguez encabezaron la poco efectiva intención de ataque del conjunto bonaerense, sus propuestas se diluyeron rápidamente y los punteros Cristian García y Ramírez llegaron forzados, incómodos, al área visitante.
El arquero Esteban Dreer respondió bien en el par de veces en que fue exigido, Cristian Cordero, Fernando Fajardo y Michael Endara intentaron jugar, aunque sin progresar demasiado en el campo, mientras Banfield parecía tener las pilas descargadas.
Pocas veces en el año el equipo de Julio César Falcioni se mostró tan desorientado, carente de reacción ante un rival que, lejos de colgarse del travesaño para llevarse una mínima renta, decidió jugar más adelantado de lo que los locales suponían.
Tras el descanso, Rodríguez se encendió y elaboró la mejor jugada del encuentro: superó a su marcador por la banda izquierda tras abrir un surco por ese sector, lanzó un centro a la entrada de Ramírez y éste abrió el marcador con clamoroso un remate de cabeza.
Con esa ráfaga de fútbol, Banfield hizo pie en el partido, se sacó un peso de encima y tras varios intentos fallidos aumentó la cuenta a los 67, otra vez con un cabezazo de Ramírez tras un remate de falta del uruguayo Cardaccio.
El choque se calentó cuando el argentino Gabriel Méndez sorprendió adelantado a Lucchetti con un remate de media distancia y anotó para el Deportivo Cuenca, a los 71 minutos.
Pero Erviti liquidó al conjunto ecuatoriano con una jugada personal y una definición exquisita y Lucchetti ató el paquete de penal, tras una falta de Juan Guerrón sobre el uruguayo Sebastián Fernández.
Así, Banfield sigue adelante, con mayor o menor nivel, pero continúa adelante en la Libertadores y se ilusiona con una histórica consagración continental, a la espera de conocer a su próximo rival.
Este partido de la jornada de cierre el grupo 6 de la Copa Libertadores se disputó en el estadio Florencio Sola, situado en la zona Sur del Gran Buenos Aires, ante 22.000 espectadores.
El equipo del Sur del Gran Buenos Aires obtuvo la victoria en la segunda parte de un partido que tenía complicado en los primeros 45 minutos por su propia inoperancia, pese a la necesidad de lograr los tres puntos para continuar en la máxima competición continental.
Banfield finalizó segundo en el Grupo 6, con 11 puntos, y quedó a sólo una unidad del líder, Nacional, que a su vez venció por 2-0 en Montevideo al otro equipo que también ya había sido eliminado, el Monarcas Morelia mexicano.
Una jugada del colombiano James Rodríguez y un tiro libre del uruguayo Matías Cardaccio rompieron la monotonía del ataque de Banfield para que Rubén Ramírez anotara dos veces de cabeza, amplió Walter Erviti tras una jugada personal y coronó la goleada el arquero Cristian Lucchetti, de penal.
El gol de Gabriel Méndez, a los 71 minutos, fue el único del conjunto visitante, que con lo mínimo indispensable se las arregló en la primera parte para planchar el partido, mantener el juego lejos de su área y cuidar hasta donde podía la posesión de la pelota frente a un Banfield desconectado.
Erviti y el colombiano Rodríguez encabezaron la poco efectiva intención de ataque del conjunto bonaerense, sus propuestas se diluyeron rápidamente y los punteros Cristian García y Ramírez llegaron forzados, incómodos, al área visitante.
El arquero Esteban Dreer respondió bien en el par de veces en que fue exigido, Cristian Cordero, Fernando Fajardo y Michael Endara intentaron jugar, aunque sin progresar demasiado en el campo, mientras Banfield parecía tener las pilas descargadas.
Pocas veces en el año el equipo de Julio César Falcioni se mostró tan desorientado, carente de reacción ante un rival que, lejos de colgarse del travesaño para llevarse una mínima renta, decidió jugar más adelantado de lo que los locales suponían.
Tras el descanso, Rodríguez se encendió y elaboró la mejor jugada del encuentro: superó a su marcador por la banda izquierda tras abrir un surco por ese sector, lanzó un centro a la entrada de Ramírez y éste abrió el marcador con clamoroso un remate de cabeza.
Con esa ráfaga de fútbol, Banfield hizo pie en el partido, se sacó un peso de encima y tras varios intentos fallidos aumentó la cuenta a los 67, otra vez con un cabezazo de Ramírez tras un remate de falta del uruguayo Cardaccio.
El choque se calentó cuando el argentino Gabriel Méndez sorprendió adelantado a Lucchetti con un remate de media distancia y anotó para el Deportivo Cuenca, a los 71 minutos.
Pero Erviti liquidó al conjunto ecuatoriano con una jugada personal y una definición exquisita y Lucchetti ató el paquete de penal, tras una falta de Juan Guerrón sobre el uruguayo Sebastián Fernández.
Así, Banfield sigue adelante, con mayor o menor nivel, pero continúa adelante en la Libertadores y se ilusiona con una histórica consagración continental, a la espera de conocer a su próximo rival.
Este partido de la jornada de cierre el grupo 6 de la Copa Libertadores se disputó en el estadio Florencio Sola, situado en la zona Sur del Gran Buenos Aires, ante 22.000 espectadores.
Nacional de Montevideo 2 - 0 Morelia
Nacional logró pasar a los octavos de final al vencer al Morelia
MONTEVIDEO (EFE) -- Nacional de Montevideo certificó su pase a los octavos de final de la Copa Santander Libertadores como primer clasificado del Grupo 6, con 12 unidades, tras vencer con justicia 2-0 al Morelia mexicano y culminar invicto su participación en la fase de grupos del principal torneo continental.
Un temprano gol de Mario Regueiro (m.3) abrió el camino para los tricolores, que pese a ser mejores no consiguieron asegurar la victoria hasta el minuto 77, cuando Mauricio Pereyra, con un remate desde el borde del área chica, anotó el segundo para los locales.
Nacional cerró su primera fase con tres victorias y tres empates e hizo inútil los esfuerzos de Banfield por ocupar la primera plaza del grupo, pese a ganarle 4-1 su encuentro a Deportivo Cuenca, en Buenos Aires.
Así, el conjunto uruguayo, conocido como el 'Bolso', finalizó su actuación en el Grupo 6 con 12 puntos, uno más que Banfield, el campeón argentino. En tanto, Morelia terminó con cinco y Cuenca, con apenas cuatro.
Desde el primer minuto, Nacional demostró que su intención era llevase el partido y la clasificación y que nada de lo que hicieran los mexicanos podría cambiar el resultado, un planteamiento al que Morelia, con un equipo de circunstancias, no pareció poner muchas trabas.
Apenas discurridos tres minutos de juego, Regueiro abrió el marcador para los locales al aprovechar una muy buena jugada de Matías Cabrera, que corrió por la línea de fondo y se deshizo de dos rivales para dejar la pelota lista a su compañero, que solo tuvo que empujarla para anotar.
Con el gol a favor, y sin apuros, Nacional cedió un poco de espacio, aunque siguió dominando y amenazando a la endeble defensa visitante, que perdía la marca con facilidad y que no parecía muy confiada en sus posibilidades.
Antes de la primera media hora, los uruguayos ya habían dilapidado tres inmejorables ocasiones de gol, ante la impotencia de sus rivales, que cuando tocaba la pelota lo hacía muy lejos del área de Nacional.
Los mexicanos sólo lograron acercarse con algo más de intención al área rival cuando Nacional cedió el control de la pelota, lo que fue aprovechado por Oscar Rojas para despertar el temor entre los aficionados locales.
Ya en la reanudación, Nacional retomó la posesión y se volvió a lanzar sobre el arco defendido por Miguel Angel Fraga, aunque en esta ocasión Morelia peleó con mayor voluntad y cierta dureza, que no fue castigada por el árbitro.
Tuvo que ser el recién ingresado Mauricio Pereyra el que dio por fin la tranquilidad a los uruguayos en el minuto 77 tras un veloz contraataque de Regueiro, el mejor del partido, que dejó la pelota franca y al borde del área chica para que el delantero certificara el paso de Nacional a la siguiente fase del torneo.
Este encuentro de la jornada final del Grupo 6 se jugó en el Parque Central, de Montevideo, ante 15.000 espectadores.
Un temprano gol de Mario Regueiro (m.3) abrió el camino para los tricolores, que pese a ser mejores no consiguieron asegurar la victoria hasta el minuto 77, cuando Mauricio Pereyra, con un remate desde el borde del área chica, anotó el segundo para los locales.
Nacional cerró su primera fase con tres victorias y tres empates e hizo inútil los esfuerzos de Banfield por ocupar la primera plaza del grupo, pese a ganarle 4-1 su encuentro a Deportivo Cuenca, en Buenos Aires.
Así, el conjunto uruguayo, conocido como el 'Bolso', finalizó su actuación en el Grupo 6 con 12 puntos, uno más que Banfield, el campeón argentino. En tanto, Morelia terminó con cinco y Cuenca, con apenas cuatro.
Desde el primer minuto, Nacional demostró que su intención era llevase el partido y la clasificación y que nada de lo que hicieran los mexicanos podría cambiar el resultado, un planteamiento al que Morelia, con un equipo de circunstancias, no pareció poner muchas trabas.
Apenas discurridos tres minutos de juego, Regueiro abrió el marcador para los locales al aprovechar una muy buena jugada de Matías Cabrera, que corrió por la línea de fondo y se deshizo de dos rivales para dejar la pelota lista a su compañero, que solo tuvo que empujarla para anotar.
Con el gol a favor, y sin apuros, Nacional cedió un poco de espacio, aunque siguió dominando y amenazando a la endeble defensa visitante, que perdía la marca con facilidad y que no parecía muy confiada en sus posibilidades.
Antes de la primera media hora, los uruguayos ya habían dilapidado tres inmejorables ocasiones de gol, ante la impotencia de sus rivales, que cuando tocaba la pelota lo hacía muy lejos del área de Nacional.
Los mexicanos sólo lograron acercarse con algo más de intención al área rival cuando Nacional cedió el control de la pelota, lo que fue aprovechado por Oscar Rojas para despertar el temor entre los aficionados locales.
Ya en la reanudación, Nacional retomó la posesión y se volvió a lanzar sobre el arco defendido por Miguel Angel Fraga, aunque en esta ocasión Morelia peleó con mayor voluntad y cierta dureza, que no fue castigada por el árbitro.
Tuvo que ser el recién ingresado Mauricio Pereyra el que dio por fin la tranquilidad a los uruguayos en el minuto 77 tras un veloz contraataque de Regueiro, el mejor del partido, que dejó la pelota franca y al borde del área chica para que el delantero certificara el paso de Nacional a la siguiente fase del torneo.
Este encuentro de la jornada final del Grupo 6 se jugó en el Parque Central, de Montevideo, ante 15.000 espectadores.
Nacional 2 - 0 Monterrey
Nacional venció al Monterrey en Paraguay, en la despedida
ASUNCION (EFE) -- El Nacional paraguayo se despidió de la Copa Santander Libertadores con una victoria por 2-0 ante el también eliminado Monterrey mexicano, en partido de la sexta y última jornada del Grupo 2.
En otro partido del mismo grupo, el Sao Paulo de Brasil derrotó en casa al Once Caldas de Colombia por 1-0 y ambos se clasificaron a los octavos de final, quedando en el primer puesto el conjunto paulista.
Con este resultado, el conjunto 'tricolor' paraguayo registró su único triunfo en esta edición del torneo continental, mientras que el Monterrey pasará a las estadísticas con los seis puntos que ha totalizado en igual número de cotejos.
Ambos equipos presentaron una formación dominada por suplentes debido al carácter del encuentro y los 'Rayados' viajaron a Asunción con una plantilla de 14 jugadores con el segundo entrenador, Carlos Barra, al frente del equipo.
Aldo Paniagua (m.5) y Guillermo Beltrán (m.67) marcaron los goles del Nacional, que no apuró la marcha del encuentro y sacó provecho de los errores defensivos de un rival que tampoco ofreció mucho como para revertir el marcador.
Nacional, bajo la batuta de su nuevo técnico, el ex delantero internacional Juan Manuel Battaglia, pudo haber logrado mayor ventaja si no fuera por la gestión del arquero Orozco, que en la primera parte desvió dos remates de Aquino a la red.
También el Monterrey tuvo sus momentos, entre ellos en el remate de Osvaldo Val Baiano que se estrelló en el travesaño, pero prefirió no arriesgar a alguna lesión a sus jugadores, pensando en el torneo de liga.
Este encuentro de la última jornada del Grupo 2 de la Copa Libertadores se disputó en el estadio Defensores del Chaco, en Asunción, ante apenas 240 espectadores que pasaron por taquilla.
En otro partido del mismo grupo, el Sao Paulo de Brasil derrotó en casa al Once Caldas de Colombia por 1-0 y ambos se clasificaron a los octavos de final, quedando en el primer puesto el conjunto paulista.
Con este resultado, el conjunto 'tricolor' paraguayo registró su único triunfo en esta edición del torneo continental, mientras que el Monterrey pasará a las estadísticas con los seis puntos que ha totalizado en igual número de cotejos.
Ambos equipos presentaron una formación dominada por suplentes debido al carácter del encuentro y los 'Rayados' viajaron a Asunción con una plantilla de 14 jugadores con el segundo entrenador, Carlos Barra, al frente del equipo.
Aldo Paniagua (m.5) y Guillermo Beltrán (m.67) marcaron los goles del Nacional, que no apuró la marcha del encuentro y sacó provecho de los errores defensivos de un rival que tampoco ofreció mucho como para revertir el marcador.
Nacional, bajo la batuta de su nuevo técnico, el ex delantero internacional Juan Manuel Battaglia, pudo haber logrado mayor ventaja si no fuera por la gestión del arquero Orozco, que en la primera parte desvió dos remates de Aquino a la red.
También el Monterrey tuvo sus momentos, entre ellos en el remate de Osvaldo Val Baiano que se estrelló en el travesaño, pero prefirió no arriesgar a alguna lesión a sus jugadores, pensando en el torneo de liga.
Este encuentro de la última jornada del Grupo 2 de la Copa Libertadores se disputó en el estadio Defensores del Chaco, en Asunción, ante apenas 240 espectadores que pasaron por taquilla.
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