El club londinense contactará con el portugués
Capello había anunciado que no seguía tras al Eurocopa pero al final se hartó de todo lo que rodea el cargo y decidió irse a casa. Su marcha creará un efecto dominó que podría afectar a varios clubes importantes de la Premier y al propio Mourinho si finalmente insiste en abandonar el Madrid. Empezando por el Tottenham. Redknapp lleva dos años intentando ser seleccionador inglés. Ha quedado liberado judicialmente de una supuesta evasión de impuestos y una inexplicable cuenta en Mónaco abierta a nombre de su perra Rosie, con lo que le ha surgido la oportunidad de oro.
Stuart Pierce se hará cargo de la selección de momento, pero Redknapp es el favorito de las apuestas. Se habla de Hiddink, Martin O'Neill, Benítez e incluso Mourinho como posibles recambios de Capello, pero la federación, que se reunirá hoy para empezar a sondear el mercado, busca un entrenador local. Antes de la llegada de Capello, el propio Mourinho puso su nombre en la lista e incluso llegó a reunirse con los directivos de la federación. Su objetivo era otro: mejorar su contrato con el Inter y lo logró. "No me veo siendo seleccionador de un país que no sea Portugal", afirmó la temporada pasada.
Buena relación.
En el Tottenham se frotan las manos porque, pese a lo que parezca, no hay mucha sintonía entre el presidente Daniel Levy y su manager. De hecho, ante la posibilidad de un castigo judicial severo o su fichaje por la federación inglesa, el Tottenham no le dio a Redknapp ni un céntimo para gastar en el último mercado de fichajes. Y le dejará marchar si recibe la oferta de la selección este verano. Cuando eso ocurra, Levy volverá a ponerse en contacto con Mourinho, con quien tiene una relación fluida. Benítez está también en la lista.
Cuando el portugués dejó caer recientemente que tenía decidido irse del Madrid, sugirió que aceptaría cualquier oferta de un grande inglés, incluido el Tottenham. Pero fuentes cercanas al técnico aseguran que si al final se marcha será para hacerse con las riendas del City. Mancini tiene enemigos en el vestuario y se le ha mantenido en el cargo porque ganó la Copa y puede llevarse la Liga. Pero si Mou está disponible, Mancini podría ser despedido.
Abramovich se ha reunido en los últimos días con Villas-Boas. Su relación es excelente y el dueño del Chelsea entiende que la temporada es de transición. Le mantendrá en el cargo y ya ha fichado dos futbolistas para la 2012-13. Se rumorea que ésta podría ser la última campaña de Wenger en el Arsenal, pero si fuera así sería éste el que escogiera a su sustituto y no tiene buena relación con Mou. Por tanto, sólo queda el Tottenham, un club con una ambición limitada y un presupuesto que sólo permite luchar por quedar entre los cuatro primeros: el club querría a Mourinho, pero no encaja con el tipo de entidad que suele atraer al portugués.
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