En Casa Amarilla,el plantel se entrenó, después de un día de furia; el DT le habló al plantel y también se juntó con los referentes; "Va a ser difícil seguir, pero hay que poner buena voluntad", pronosticó el vicepresidente Crespi
(Télam).- Boca parece haber dejado atrás por unas horas el culebrón en que se vieron envueltos el entrenador Julio Falcioni, casi la totalidad del plantel y parte de la comisión directiva, y practicó hoy en un clima tenso, con miras al partido del domingo ante Unión, en Santa Fe.
La discusión que se inició en el vestuario boquense tras el empate 0-0 ante Zamora, de Venezuela, anteayer, con la discusión entre el DT y Juan Román Riquelme, el apoyo del plantel al capitán y la renuncia del entrenador al sentirse desautorizado, tuvo hoy su "día después" en el predio de Casa Amarilla.
Falcioni, quien ayer renunció y luego acordó su continuidad "bajo ciertas pautas" con el presidente del club Daniel Angelici, llegó a la Boca a las 8.45 y de inmediato se dirigió a su vestuario, donde cinco minutos más tarde mantuvo una reunión con Riquelme, el Flaco Rolando Schiavi y Agustín Orión.
Los tres referentes dialogaron con el DT hasta las 9.30, cuando comenzó la práctica con el plantel dividido en dos grupos, entre los que jugaron en Venezuela y los que no lo hicieron.
Así, mientras los titulares trabajaron en el gimnasio, los demás jugaron al fútbol ante juveniles, todo esto bajo la atenta mirada de Angelici, el vicepresidente Juan Carlos Crespi y el subtitular de fútbol profesional, José Requejo, los tres arribados a las 10.15.
La palabra de Juan Carlos Crespi "El problema existió, no podemos minimizar todo. No va a ser fácil seguir, pero hay que poner buena voluntad", dijo el vicepresidente xeneize en 90 Minutos de Fútbol, por Fox Sports "Se le dio una trascendencia más grande de lo que fue. Falcioni en ningún momento presentó la renuncia.", aclaró
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