El Madrid tendrá una oportunidad de adelantarse al Barça por la contratación de Neymar en enero. Pero tendrá que pagar por el jugador 10 millones más (hasta los 55) de lo que indica su actual cláusula. Eso es lo que le costará la intromisión del Barça, que intenta pescar en río revuelto. Según ha podido saber AS, el presidente Luis Álvaro no pondría inconveniente para que saliera al Madrid por esa cantidad. De hecho, según publicó ayer Lance, ha iniciado conversaciones para renovar el contrato del jugador con esa nueva cláusula (55). Pero Neymar, con contrato hasta 2015, no firmará.
El problema al que se enfrenta el Madrid es que Neymar y su entorno no quieren hacer efectiva la cláusula, sino que los clubes negocien y lleguen a un acuerdo. El chico está agradecido a su club, que ha hecho grandes esfuerzos económicos por él, y quiere un negocio rentable para los peixe. Florentino lo sabe. Tendrá que negociar, y en peor situación por los movimientos de Rosell, que ofrece al Santos 60 millones en enero de 2013 e intenta convencer al jugador para vestir de blaugrana.
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