El asturiano configuró el F10 pensando en las malas condiciones climatológicas que se esperan para la carrera de hoy. Webber logró la pole, Hamilton brilló y espectacular actuación de Alguersuari, undécimo
Surprise? No, no surprise". En una silla roja, encogido en su propio universo, pero mirando cara a cara, Fernando Alonso negaba que su décimo puesto en la calificación fuera una sorpresa. Ya decíamos ayer que Spa es diferente, el circuito donde todo puede cambiar. Y ésa es la esperanza que le queda al bicampeón español, que hoy todo vuelva a dar un giro, como de los entrenamientos del viernes a la sesión de ayer. Y es que el mismo piloto de Ferrari que en el primer día del GP de Bélgica se mostraba como el más competitivo, no pudo pasar de la décima posición en el momento crucial del sábado.
Pero las cosas no suceden sin razón aparente. Fernando explicó que éste es un gran premio en el que se deben tomar las decisiones oportunas en el momento preciso, una prueba de apuestas. Y su carta principal es para la carrera. Ayer el Ferrari F10 del asturiano salió con una configuración especialmente preparada para lluvia, con una aerodinámica pensada para el día de hoy. En el equipo italiano creía que iba a llover en la calificación y también en la carrera. Y a eso apostaron. Ayer salió cruz. Veremos si hoy aparece la cara de la moneda...
Pero hay más. El mejor tiempo de Fernando lo consiguió con los neumáticos blandos usados que ya había llevado en la Q2, y en el momento en el que puso las gomas para poder hacer una buena vuelta que le aupase en la clasificación, se puso a llover. Décimo. Y sólo décimo. Muy atrás, probablemente incluso con la configuración específica el ovetense no pensaba quedar tan relegado. Su lugar natural hubiera sido cuarto en el mejor de los casos, por delante de Massa. No pudo ser, el doble campeón no pudo más.
El brillo lo puso Hamilton. El británico saldrá segundo tras una vuelta espectacular con su McLaren, empapándose en la zona de La Source. Su puesto de ayer demuestra que el coche de plata es uno de los más veloces aquí y que el campeón de 2008 posee un talento extraordinario. Como Kubica, tercero, con un Renault que ni siquiera pudo dar una vuelta con Petrov. El polaco es un piloto fuera de serie que merece un sitio donde los coches vuelen.
Una oportunidad que está aprovechando Webber, el líder del Mundial que logró su quinta pole del año, otra más para Red Bull, denostados hasta la hora de la verdad, y es uno de los grandes favoritos para una carrera de pronóstico inalcanzable. Mientras, Alguersuari tuvo una destacadísima actuación y saldrá undécimo. Y De la Rosa se equivocó con los neumáticos y parte 22º. Hoy todavía puede pasar de todo en Spa...
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