Una decisión bien pensada
-- Durante los pasados tres meses Greivis Vásquez, el base venezolano que juega para la Universidad de Maryland en el basquetbol universitario de Estados Unidos, estuvo analizando su posible incursión al sorteo de novatos ("draft") de la NBA.
Casi inmediatamente que sus "Terps" fueron eliminados en la segunda ronda del torneo de la NCAA en marzo, Vásquez, un jugador de tercer año de 6'6" de estatura (1.98m.), dio a conocer su decisión de hacerse provisionalmente elegible para el "draft", pero sin firmar con ningún agente.
Esta condición era muy importante porque le permitía entrenar y audicionar con los distintos equipos de la NBA, para auscultar el posible interés de estos en seleccionarle, pero le dejaba la puerta abierta para regresar a estudiar y competir en su último año en Maryland, si esa era finalmente su elección.
El plazo para sacar su nombre de la lista de elegibles al sorteo y regresar a la universidad vencía este pasado lunes 15 de junio, a las 5 de la tarde (hora del Este de EE.UU.) y Greivis, como para asegurarse que estaba tomando la determinación correcta, se tomó hasta el último momento para hacer saber su decisión de retirarse del "draft".
Apenas un par de horas antes de que venciera el plazo, Vásquez se encontraba reunido con su entrenador en Maryland, Gary Williams y su asesor y antiguo entrenador en la Academia Montrose Christian, Stu Vetter, tratando de llegar a una decisión final.
Esta era la segunda reunión de este tipo en menos de 24 horas que sostenían estas mismas tres personas en la oficina de Williams, ubicada en el Centro Comcast, hogar de los Terps y escenario de muchas de las mejores actuaciones del caraqueño en los pasados tres años.
Las razones que llevaron a Vásquez a postergar su entrada a la NBA un año más y completar su carrera universitaria fueron varias.
La más importante fue que se dio cuenta de que este draft era uno que estaba plagado de pilotos de calidad (hasta 10 jugadores de la posición 1 pueden llegar a ser seleccionados en la primera vuelta) y él estaba siendo proyectado como una elección de segunda ronda.
La segunda razón de peso es que al regresar a jugar en la Universidad de Maryland en su cuarto año, Greivis se proyecta como el mejor base de toda la Conferencia de la Costa del Atlántico (ACC) y, junto con otros cuatro titulares de la temporada pasada que regresan, convierte a su equipo en uno de los favoritos para ganar la Conferencia y ser contendores al título de la NCAA.
Esto elevaría considerablemente las acciones de un jugador que ya este pasado año encabezó a su equipo en puntos, rebotes, asistencias, robos de balón y minutos jugados.
Otra motivación para Greivis es la de seguir creciendo en tres áreas que le pueden dar más solidez como jugador: reducir la cantidad de pérdidas de balón sin que se reduzcan sustancialmente las asistencias, lograr más consistencia en su tiro exterior y mejorar su defensa de uno contra uno para ser capaz de contener mejor las penetraciones de sus rivales.
La mejoría en estos tres aspectos, la experiencia de un año adicional y el hecho de que no se espera que haya tantos "point guards" en el draft del 2010 le garantizarían una elección de primera vuelta y posiblemente de entre las primeras 14 selecciones (denominadas selecciones de lotería).
La cuarta y muy importante razón tiene que ver con la motivación de honrar a sus padres, seguir pagándoles con creces los sacrificios realizados para ayudarlo a salir adelante y darles el mayor orgullo que un hijo les pueda brindar.
Después de todo, cuando Greivis comenzó su carrera universitaria, Ivis y Gregorio no le pidieron que llegara a la NBA, sino que saliera de Maryland con un título. Eso también está a su alcance al regresar para un cuarto año.
Cabe señalar que cada paso que dio el base en los pasados tres meses fue programado y analizado tanto por él como por sus asesores que, además de Williams y Vetter, incluía también al asistente de los Terps, Robert Ehsan, encargado de programar las audiciones con los equipos de la NBA.
El trabajo fue arduo y metódico, como lo muestra el hecho de que Vásquez terminó entrenando o entrevistándose con 25 de los 30 equipos que forman parte de la NBA.
El resultado ha sido una decisión tomada a base de tener un gran banco de información y todas las cartas sobre la mesa.
En ese sentido Greivis se puede sentir tranquilo; su elección parece haber sido la correcta desde todos los puntos de vista posibles.
publicado por:jesus mendez
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