Y a soy jugador del City. Feliz de estar en este club y en esta ciudad. ¿Gracias a todos por el recibimiento y la bienvenida!". Así dio por concluida ayer Kun su aventura rojiblanca a través de Twitter. Su fichaje por el City se cerró tras pasar por las fases habituales: culebrón, dudas, negociaciones, mensaje en Twitter y revisión médica.
Desde que su agente le hiciera llegar a Buenos Aires los detalles de su contrato (y tras descubrir desconcertado que el Madrid no daba un paso adelante y que la Juventus, aunque ambiciosa, pertenece a una liga menor a la inglesa), el destino estaba claro. Llegó minutos antes de las siete de la mañana de ayer a Heathrow y ahí tomó otro vuelo a Manchester para reunirse con los dirigentes del City y cerrar definitivamente este capítulo complejo de su carrera. "Recién aterrizado en Manchester para ultimar los detalles de la firma con el City. Va todo muy bien! En un rato les cuento más", anunció Agüero en su cuenta personal. El City siempre ha estado dispuesto a pagar la cláusula de rescisión del futbolista y así lo comunicó al Atlético al principio del verano. Las cifras que le ofrecieron al jugador son mareantes (9 millones de euros por temporada, seis años de contrato) y requerían poca negociación.
El City fue paciente porque sabía que nadie más podía acercarse a lo que ofrecía y desde el club inglés se considera un insulto que en España se sugiera que podría ser un fichaje puente para que el Kun acabe en el Madrid. "Pero, ¿quién os creéis que somos?", dice sorprendido un dirigente del club de la Premier. "Estamos aquí para ganar títulos y disputar la hegemonía del Madrid y del Barcelona". Por su parte, el Atlético informaba anoche a última hora que el club inglés no había abonado aún la cláusula. Desde el Calderón se iba a insistir en incluir en el contrato una cláusula para impedir que Kun firme por el Madrid en dos años.
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