Derrota con atenuantes
Udinese fue letal de contraataque, pero el penal que abrió el marcador fue inventado por el juez de línea.
- La serie negativa de Roma parece no tener fin: en Udine, el equipo giallorosso sufrió la cuarta derrota consecuiva, incluyendo la Champions, la quinta caída en ocho fechas de campeonato.
Si embargo, fue una derrota con atenuantes: Udinese abrió el marcador con un penal de Antonio Di Natale inexistente y luego, de contra, volvió a anotar con Antonio Floro Flores y el mismo Di Natale. Francesco Totti, también de penal, le dio cifras definitivas al marcador.
Con este triunfo, Udinese suma 17 puntos y comparte la primera posición con Inter y Nápoli, mientras que Roma aún tiene 7 unidades y se ubica catorceva junto a Sampdoria y Cagliari, apenas un escalón por arriba del umbral del descenso.
El partido fue bastante equilibrado al comienzo, hasta el grave error del juez de línea: en efecto, a los diez minutos de juego Tonetto le cometió falta a Floro Flores, pero claramente afuera del área, mientras que el asistente le informó lo contrario al referí, quien no tuvo más remedio que cobrar el penal, que Di Natale transformó en el primer gol.
Con la ventaja puesta y un Loria impresentable en la defensa visitante, el partido estaba prácticamente sentenciado. Roma reclamó una pena máxima por una falta clarísima sobre De Rossi, pero esa vez el referí no se animó. Luego, Floro Flores se "bebió" dos veces a Loria en velocidad: en la primear Doni fue salvado pro el poste a su derecha, en la segunda fue gol. Realmente impresentable lo del defensor central.
En la segunda etapa, Roma siguió atacando con todo, con el ingreso de Pizarro por Loria. Pero la pelota no quería entrar y el partido quedó definitivamente sentenciado cuando Cicinho eró un gol imposible a dos metros de Handanovic: en la contra, Di Natale se fue con una pradera por delante y definió el mano a mano con un disparo cruzado perfecto.
Con mucha dignidad, Roma siguió buscando y encontró el gol del honor con un penal, también muy dudoso, de Handanovic a Brighi: Totti lo transformó con la acostumbrada categoría. En el final, Handanovic salvó en ocasión de remates de Totti y de Menez: realmente, un partido desafortunado para Roma, que sin dudas aumenta el alcance de su crisis.
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