El argentino mantiene la incógnita sobre su futuro: "Ya dije que cuando terminase la temporada hablaríamos dos partes para evaluar la continuidad, o no, del cuerpo técnico".
Marcelo Bielsa también rechazó hablar de su futuro después de la final y lo dejó todo en el aire: "Ya dije que, finalizada la competencia, dos partes se van a reunir para evaluar la continuidad, o no, del cuerpo técnico que encabezo". El argentino se responsabilizó de la derrota como hizo en Bucarest: "Asumo que el planteamiento que presentamos no fue el acertado y me hago cargo. El que toma las decisiones soy yo y cuando tengo una adhesión y una respuesta absoluta de los jugadores, que es una necesidad, entonces voy con ello. Pero estuvo mal elegido. No conozco otra cosa. Interpreto el fútbol como lo propongo, pero es posible que se pueda neutralizar a un nivel superior sin jugar a la par. Evidentemente, la realidad se ha demostrado la contraria. De las tres veces que jugamos contra el Barça, sólo jugamos una vez como yo había preparado. No fue posible. El camino elegido no era por el que yo opté. Preparé el partido para que tuviésemos dinamismo, intensidad y protagonismo. No lo conseguimos. Asumo que el intento fue fallido, que no se consiguió lo que se propuso y la respuesta es lo que hizo".
El argentino agradeció el trabajo realizado a sus jugadores y al público también le aplaudió por su comportamiento: "Estoy feliz por la temporada. El Athletic de Bilbao es una experiencia que cualquier hombre que ame el fútbol debería tener. Perdimos las finales por tres goles de manera justa y eso opaca el desarrollo anterior. Represento y soy responsable de un equipo que en el día de hoy no estuvo a la altura de la ilusión de su público. Agradezco la generosidad, es conmovedora su fidelidad pero eso no evita que lamentemos tanto esto".
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