Brasil: discuten poder de FIFA en la Ley
Los reclamos por la ley, que el gobierno pretende aprobar este año, llegaron tanto de legisladores oficialistas como opositores, lo que anticipa las dificultades que enfrentará la iniciativa.
"La FIFA no puede mandar en nuestro país", se quejó el ex futbolista Romario, diputado del oficialista Partido Socialista Brasileño.
Romario, uno de los últimos grandes goleadores del fútbol brasileño, criticó una disposición en la ley que exime a la FIFA de responsabilidad por daños sufridos por aficionados durante el torneo, y anunció que propondrá una enmienda que establezca la responsabilidad solidaria del organismo rector del balompié mundial junto al poder público de Brasil.
"No podemos permitir que se cree el estado FIFA dentro del estado brasileño", alertó el legislador José Rocha, del Partido de la República, socio de la coalición de gobierno, al reclamar sobre las exigencias de la FIFA de fijar precios de las entradas, controlar su venta e impedir cobrar mitad de precios para ancianos y estudiantes.
El tema fue discutido durante una audiencia de la comisión especial encargada de analizar la Ley General del Mundial en la que participaron representantes de organismos de defensa del consumidor.
El responsable de defensa del consumidor del Ministerio de Justicia, Vinicius Marques de Carvalho, explicó en la sesión que el Mundial pertenece a la FIFA, que tiene derecho de fijar las condiciones de los partidos, incluyendo el precio de las entradas y las condiciones para su venta.
Señaló que la ley es un conjunto especial de normas que fijan las reglas para un evento y que sólo tienen validez durante los preparativos y la realización del evento, programado para julio de 2014.
Aseguró que principios de la legislación brasileña, como la media entrada para ancianos, fue preservada en la propuesta de ley enviada al Congreso.
"La ley crea derechos de propiedad para la FIFA, pero limita la extensión de esos derechos", aseguró Carvalho.
No obstante, el abogado Guilherme Rosa Varella, del Instituto Brasileño de Defensa del Consumidor, sostuvo que ninguna norma incluida en la ley puede contrariar el Código de Defensa del Consumidor, y que la FIFA debe apegarse a las leyes locales como cualquier otro proveedor de servicios.
Advirtió que el derecho que la ley otorga a la FIFA para vender entradas en paquete y no individualmente está expresamente prohibido por la legislación brasileña.
Ante los cuestionamientos a la ley, el legislador opositor Cesar Colnago, consideró que el gobierno habría hecho una mala negociación con la FIFA al adjudicarse el Mundial de 2014.
"¿Será que el gobierno negoció mal con la FIFA?", preguntó Colnago. "Si alguien negoció algo que hiere nuestros derechos fundamentales y sociales, negoció mal".
El secretario ejecutivo de la FIFA, Jerome Valcke, tiene previsto visitar Brasil para presionar al gobierno y el Congreso a aprobar la ley.
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