Una vez sopesados los sucesos ocurridos en el estadio Agustín Tovar La Carolina de Barinas el pasado domingo 27 de noviembre durante el partido entre Zamora FC y Mineros de Guayana, la Asociación Civil Zamora Fútbol Club se pronuncia de manera oficial.
1.- Recalcamos de manera fehaciente nuestro rechazo ante cualquier tipo de acto violento que se cometa en contra de personas o instalaciones deportivas.
2.- Antes, durante y después del compromiso un total de 200 efectivos policiales y militares estuvieron a cargo de la seguridad del recinto deportivo barinés.
3. Luego del incidente en el que el árbitro asistente, José Mora, fuera impactado por una botella vacía de plástico, y el partido fuera suspendido, las autoridades controlaron de manera eficaz a un pequeño grupo de aficionados que se lanzó al terreno de juego.
4. Los aficionados que se acercaron al túnel de vestuarios también fueron controlados por las autoridades y, en su mayoría, solo pedían la reanudación del compromiso.
5. Tras la suspensión oficial del encuentro, el público, equipos, personal del estadio y los árbitros salieron del escenario en total calma.
Valga nuestra posición para defender el civismo y los valores deportivos que nuestra institución y nuestros ciudadanos ostentan y, que en muchos casos están por encima de la actuación de dirigentes y árbitros, quienes abusan de su autoridad, pervirtiendo el espectáculo deportivo y afectando el trabajo de los equipos de fútbol profesional en Venezuela. Tal situación nos obliga a denunciar:
1.- Los insultos proferidos por parte del árbitro principal del encuentro, Luis Márquez, al jugador Darío Figueroa, quien protestó de manera pacífica una decisión que consideró injusta y recibió a cambio un lenguaje soez.
2.- La constante predisposición con la que los árbitros tratan al Zamora FC durante los partidos del Torneo Apertura 2011.
3.- Las injurias y especulaciones surgidas por algunos periodistas y medios de comunicación, quienes sin estar presentes en La Carolina, manifestaron opiniones poco o nada ajustadas a la realidad, manchando la imagen de los aficionados barineses y del propio club.
Declaración que se hace en Barinas a los 28 días del mes de noviembre de 2011.
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