martes, 5 de junio de 2012

Carlos Bianchi analiza equipo por equipo, cómo quedó el panorama de las Eliminatorias Sudamericanas


Así está la eliminatoria sudamericana


El análisis uno por uno de los seleccionados de la región tras otra fecha de competencia


Carlos Bianchi
Por Carlos Bianchi



Messi fue la gran figura de Argentina en el triunfo ante Ecuador
BUENOS AIRES -- La nueva fecha de eliminatorias sudamericanas trajo cambios en la tabla de posiciones. De los tres punteros que entraron a esta jornada, sólo uno quedó en pie, ya que los otros dos empataron entre sí.
Las posiciones están muy apretadas y todavía es muy temprano como para ver tendencias irreversibles, pero algunos equipos parecen haber asomado la cabeza por sobre otros. Veamos qué dejó cada uno de ellos este fin de semana como para tratar de anticipar cómo sigue este largo recorrido hacia Brasil 2014.
Argentina tuvo un partido ideal ante Ecuador: todo le salió bien, tuvo al mejor jugador del mundo inspiradísimo y dio una lección de practicidad, pero queda flotando la sensación de que hay un equipo de mitad de cancha para adelante y otro de allí para atrás.
Empecemos por el ataque: no hay ninguna selección en América y probablemente en el mundo entero con tamaño potencial ofensivo. Y eso no pasa solamente por tener a Messi, el mejor de todos los tiempos. Agüero, Higuaín y Di María fueron campeones en sus ligas y aportan su cuota para desequilibrar a la defensa más hermética, así esta sea un símil de la Línea Maginot como la que plantó Ecuador en el Monumental.
En cambio, atrás no da la sensación de tener la misma seguridad y solidez como para aguantar un resultado. Aún ante un Ecuador con poca vocación de ataque, sufrió sofocones que se podrían haber transformado en gol. La defensa tendrá que pasar pruebas más exigentes para demostrar que está a la altura del desafío.
De cualquier manera, da toda la sensación de que con este régimen de eliminatorias (sin Brasil, con cuatro de nueve que irán directo y el quinto a un repechaje), la clasificación argentina no debería estar jamás en peligro.
Y no puedo dejar de insistir con lo que genera Messi: es el rey del desequilibrio y, haga lo que haga, parece que siempre consiguiera dejar a sus marcadores a contrapié. Esa velocidad extra que tiene cuando parece que ya llegó a máxima me hace acordar a Cruyff en su mejor época. Sin dudas, Messi sigue creciendo y el sábado, con una actuación tan fenomenal, saldó de alguna manera la deuda que algunos hinchas le reclaman, la de brillar con su selección.
Chile ganó por tercera vez consecutiva por 2-0 y no pareció sentir la altura en Bolivia. Borghi contó que se prepararon en un cuartel para la altura y fueron claramente superiores en un terreno habitualmente complicado para muchas selecciones.
La Roja mantiene el nivel de las últimas eliminatorias y del Mundial, pese a haber pasado por un proceso de ajuste a un nuevo DT. Pero Borghi parece haber aprendido la lección de la derrota inicial ante Argentina, en la que de tan inocente se terminó suicidando. Tiene un plantel con jugadores muy interesantes que siguen madurando y en su próximo partido ante Venezuela, hoy un rival directo, puede confirmar todo lo bueno que viene mostrando.
Diego Forlan
APEl gol de Forlán no le alcanzó a Uruguay para sumar de a tres
Uruguay está igual en puntos que Venezuela, su último rival, pero con un partido menos. Extrañamente, su tridente ofensivo no funcionó con la eficacia habitual, y ni siquiera con ventaja en el marcador y espacios en el terreno de juego pudieron Forlán, Cavani y Suárez ser lo desequilibrantes que suelen ser.
Con el partido que tiene a su favor, y pensando que el próximo fin de semana recibe a Perú, hoy por hoy uno de los más flojos del grupo, debería quedar aún mejor posicionado.
Venezuela viene de pasar una prueba durísima ante Uruguay. La Vinotinto le hizo un partido de igual a igual a la que, por resultados recientes, es hoy la mejor selección del continente.
El gran cambio que está haciendo Venezuela es creer en sus posibilidades. Históricamente, era un equipo que se derrumbaba tras quedar abajo en el marcador, pero ahora se anima a seguir buscando, y el empate que consiguió, si bien producto del azar y del rebote en Godín, fue una prueba de esa nueva actitud.
Seguramente, eso tenga que ver también con que muchos jugadores venezolanos hoy juegan en el extranjero. Ese roce les dio una madurez y un progreso que antes no tenían, e incluso provoca un efecto de contagio entre los más jóvenes.
Pekerman
Getty ImagesJosé Pekerman debutó con un triunfo
Colombia supo aprovechar su momento, justamente ante Perú. Fue el primer partido de José Pekerman en esta eliminatoria y, si bien no deslumbró, su equipo pegó en el momento indicado y tuvo el orden necesario para superar a un rival que no lo exigió jamás al máximo.
Hay una nueva generación ofensiva que los hace ilusionar, pero la última línea es lo opuesto, una en la que prima la experiencia, con todo lo bueno y lo malo que eso acarrea. Pero si mantiene esa vocación por la victoria que demostró en Lima, seguramente esté prendido en la pelea.
Ecuador será el próximo rival de los colombianos, y llegará en estado de necesidad. Además de haber quedado fuera de zona de clasificación, lo que mostró en Buenos Aires fue demasiado pobre como para ilusionarse. Necesita sumar para luego recibir a Bolivia en busca de tres puntos que lo arrimarían nuevamente.
Es cierto que a Ecuador se le planteó el peor partido posible ante Argentina: armó un esquema defensivo que tuvo que abandonar obligado por el desarrollo del partido, pero incluso cuando tuvo que salir a buscar el descuento, mostró muy pocas armas.
Paraguay lo sigue en la tabla, una posición poco habitual para un equipo acostumbrado a mirar desde arriba en las últimas eliminatorias. Pero es cierto que quedó libre y está a la expectativa.
Si consigue emular lo hecho por Chile en la altura, debería llevarse tres puntos de La Paz y volver a estar en carrera. Después, será la hora de ir a buscar un buen resultado de visitante ante Argentina, una situación de la que en general ha salido airoso.
Perú no tuvo hambre de triunfo ni tampoco solidez como para ir a buscarlo. Es extraño que no convierta pese a los delanteros que tiene, ya que hombres como Guerrero o Farfán se han lucido en las mejores ligas europeas.
Tiene buenos jugadores y uno siempre les da crédito, pero el problema es que nunca termina de plasmarlo. Incluso perdiendo 1-0, hubo una imagen que lo explica todo: Guerrero desbordó y tiró un centro para la llegada de un solo jugador. La impresión es que no cree en la victoria, y así es imposible llegar a un Mundial.
Gustavo Quinteros
APPanorama complicado para Quinteros en Bolivia
Bolivia cierra la tabla y eso habla de lo limitado que fue lo que mostró a pesar de ser local. Le cuesta mucho tener la pelota y crearse situaciones de gol. Si no cambia de inmediato y empieza a sumar de local, usufructuando la ventaja que históricamente le daba la altura, se le hará demasiado cuesta arriba.
Brasil es la última parada de este repaso, aunque no dispute estas eliminatorias. El anfitrión del próximo Mundial viene de perder 2-0 en un amistoso con México. Es cierto que tiene un equipo muy joven y que su objetivo es el oro en Londres 2012, ya que lo más alto del podio olímpico es la cuenta pendiente. Pero tampoco puede darse el lujo de perder dos partidos seguidos, y menos si el rival del sábado que viene es Argentina.
Llegarán los dos de manera bien distinta: Argentina ilusionada con su fútbol, Brasil golpeado anímicamente y con bajas como la de Thiago Silva. Además, su defensa ofrece muchos flancos y el mediocampo no tiene la generación de juego de épocas pasadas. Así, Neymar pelea demasiado solo arriba y todavía no ha llegado a demostrar, a nivel internacional, todo lo bueno que ya hizo en su club.
De cualquier manera, estos son los partidos en los que el análisis previo poco vale: Argentina y Brasil, Brasil y Argentina (esta vez en Nueva Jersey) siempre son promesa de buen fútbol. Ojalá podamos disfrutarlos a los dos en su plenitud.
Felicidades.

Carlos Bianchi es el 13º goleador de la historia del fútbol mundial y el técnico que más títulos ganó en el fútbol argentino. Surgió como jugador en Vélez Sarsfield de su país, donde fue campeón en 1968, para luego destacarse en distintos clubes de Francia. Allí inició su carrera como técnico, antes de volver a la Argentina para ganar 15 títulos locales e internacionales, seis con Vélez y nueve con Boca Juniors. También dirigió a la Roma de Italia y al Atlético de Madrid de España y es eterno candidato a conducir a la Selección Argentina. Ha escrito para diversos medios de prensa y también se ha desempeñado como comentarista televisivo en distintos canales de Latinoamérica y del mundo. 

No hay comentarios: