Bologna 0 - 3 AC Milan
ROMA - Milan visitó a Bologna y le ganó por 3 a 0, en la que fue prácticamente la fotocopia de la victoria de la semana anterior contra Brescia, puesto que también esta vez Kevin Prince Boateng abrió el marcador, luego anotó el brasilero Robinho y, al final, Zlatan Ibrahimovic liquidó el trámite.
De esta manera, el Diávolo sigue cómodamente primero, ahora con 36 puntos, por el momento a "más seis" de la pareja de segundos formada por Lazio (un partido menos) y Nápoli. Bologna, por su parte, esperando los partidos que faltan para cerrar la jornada, se quedó doceavo junto a Fiorentina, ambos con 19 unidades.
El match realmente no tuvo historia, porque la visita fue mucho más contundente, lució un poder increíble en cada zona de la cancha y cada vez que atacó logró anotar o creó un grande peligro.
Sin embargo, el primer tiempo empezó bastante parejo y Milan tuvo la suerte de ponerse rápidamente en ventaja al primer remate al arco: Ibrahimovic se alargó por izquierda, recibió el balón, y desde su posición metió un centro muy fuerte y realmente preciso para la entrada de Boateng. El ghanés se metió al área a toda velocidad y con un gran salto alcanzó a tocar el esférico, extendiendo al máximo la pierna derecha, para tocarla de fino y mandarla a guardar.
El 1 0 indujo a los rossoneri a dejarles espacio a sus rivales para luego golpearlos de contra. Pero la táctica no fue muy funcional, porque los locales hicieron el gasto de manera ordenada, sin descubrirse demasiado y sin tirar nunca el balón, lo que determinó que el trámite se desarrollara mucho por el medio y no se vieran muchas ocasiones.
Así, los muchachos de Allegri cambiaron estrategia, se treparon en el campo, empezaron a tejer una buena trama bajo la dirección de Pirlo, con la referencia ofensiva de Ibrahimovic y la grande movilidad de Boateng y Robinho y, a los 35 minutos, metieron el 2 a 0 con una grandísima jugada: con una serie de pases en vertical los rossoneri levaron el balón rápidamente arriba hacia el volante ghanes, quien con un toque de externo delicioso lo habilitó perfectamente a Binho, para que el brasilero encarara mano a mano, resistiera al retorno de Esposito y definiera con un derechazo fuerte por debajo de las piernas del arquero.
El segundo tanto de Milan le cortó las piernas a Bologna, que en el entretiempo hubiera podido salir da la cancha hasta con un pasivo mucho más amplio de no ser por un travesaño y por un par de grandes tapadas de Viviano.
En el complemento, los rojoazules bajaron con la intención de poner presión, jugar muy ofensivos y recuperar el marcador, pero en quince minutos la visita metió el tercero y no hubo más historia. En esta ocasión, la firma fue de Ibrahimovic, quien recibió sobre la zona derecha del límite del área un pelotazo excelente de Pirlo, lo controló bárbaro, ganó el duelo físico con Britos y de interno derecho la clavó a lado del primer palo.
Bologna, incapaz de recuperar el partido, que Milan congeló bastante bien, sobre el final salió a buscar por lo menos el gol del honor, que hubiera podido anotar con un penal que Di Vaio se ganó y que él mismo se encargó de patear, pero Abbiati tapó bárbaro y le negó también esa pequeña satisfacción al equipo de Malesani.
| GOLES | |
| Bologna | AC Milan |
| Marco Di Vaio (pen fallado 78) | Kevin-Prince Boateng (9) |
| Robinho (35) | |
| Zlatan Ibrahimovic (60) | |
| ESTADÍSTICAS DEL PARTIDO | ||
| Bologna | AC Milan | |
| Disparos (al arco) | 9(3) | 16(6) |
| Faltas | 12 | 16 |
| Tiros de Esquina | 8 | 8 |
| Fuera de Juego | 3 | 2 |
| Tiempo de Posesión | 37% | 63% |
| Tarjetas Amarillas | 2 | 1 |
| Tarjetas Rojas | 0 | 0 |
| Atajadas | 3 | 3 |
AS Roma 1 - 0 Bari
ROMA - En el estado Olímpico de esta capital Roma, con un gol del brasileño Juan, derrotó por la mínima diferencia a Bari. Con este resultado, el equipo giallorosso suma 26 puntos y comparte con Palermo la quinta plaza, mientras que Bari, con 10 unidades, sigue siendo el único colero del torneo.
Alcanza con echarle una rápida mirada al historial de este enfrentamiento para entender que este resultado no puede sorprender. En efecto, estos rivales se enfrentaron por trigésima vez en este estadio, con 24 triunfos locales y 6 empates, sin éxitos visitantes.
Con más fuertes razones no tenía chance este Bari de ayer, que se presentó con un equipo casi literalmente diezmado (faltaban nueve titulares), sin delanteros de rol, con defensores contados y jugando afuera de sus posiciones naturales, en suma un conjunto desastrado y cada vez más cerca del descenso.
En cambio, sorprendió la manera en la que llegó este triunfo giallorosso: si bien Totti desperdició un penal (que a nosotros no nos pareció bien cobrado), el triunfo llegó en jugada de pelota parada y con el autor, Juan, en clara posición adelantada. Más allá de eso, Roma jugó un mal partido y Bari hasta tuvo una chance clara, sobre el final, para igualar la pizarra.
Claro, no hubiera sido justo: Gillet fue la figura y un par de veces fue salvado por los postes, a Borriello le anularon mal un gol que parecía regular (realmente pésimo el arbitraje de Romeo) y, más en general, Roma produjo mucho más que su pobre rival y sin dudas mereció ganar.
Pero ese equipo brillante y que jugaba un hermoso fútbol ya no aparece y, paulatinamente, está quedando en el olvido, remplazado por otro nervioso, poco propositivo y que depende casi exclusivamnete de lo que puedan inventar sus individualidades, que por encima en este momento se reducen casi exclusivamente a Ménez.
En efecto, el francés fue el que ofreció las cosas mejores, siempre en soledad, arrancando en vertical y llegando hasta posición de gol. En este caso, el excelente arquero belga Gillet le ganó siempre el duelo (por algo fue la figura), pero Ménez realmente pinta para volverse rápidamente el heredero de Francesco Totti, quien por encima hoy, al momento de salir remplazado, le entregó el brazalete de capitán.
El vaso medio lleno son los tres puntos, llegados a pesar de tan mala performance y que le permiten al equipo de la capital quedar por lo menos a tiro de la zona Champions. Pero el próximo sábado, en San Siro ante Milan, servirá mucho más que lo mostrado hoy.
Alcanza con echarle una rápida mirada al historial de este enfrentamiento para entender que este resultado no puede sorprender. En efecto, estos rivales se enfrentaron por trigésima vez en este estadio, con 24 triunfos locales y 6 empates, sin éxitos visitantes.
Con más fuertes razones no tenía chance este Bari de ayer, que se presentó con un equipo casi literalmente diezmado (faltaban nueve titulares), sin delanteros de rol, con defensores contados y jugando afuera de sus posiciones naturales, en suma un conjunto desastrado y cada vez más cerca del descenso.
En cambio, sorprendió la manera en la que llegó este triunfo giallorosso: si bien Totti desperdició un penal (que a nosotros no nos pareció bien cobrado), el triunfo llegó en jugada de pelota parada y con el autor, Juan, en clara posición adelantada. Más allá de eso, Roma jugó un mal partido y Bari hasta tuvo una chance clara, sobre el final, para igualar la pizarra.
Claro, no hubiera sido justo: Gillet fue la figura y un par de veces fue salvado por los postes, a Borriello le anularon mal un gol que parecía regular (realmente pésimo el arbitraje de Romeo) y, más en general, Roma produjo mucho más que su pobre rival y sin dudas mereció ganar.
Pero ese equipo brillante y que jugaba un hermoso fútbol ya no aparece y, paulatinamente, está quedando en el olvido, remplazado por otro nervioso, poco propositivo y que depende casi exclusivamnete de lo que puedan inventar sus individualidades, que por encima en este momento se reducen casi exclusivamente a Ménez.
En efecto, el francés fue el que ofreció las cosas mejores, siempre en soledad, arrancando en vertical y llegando hasta posición de gol. En este caso, el excelente arquero belga Gillet le ganó siempre el duelo (por algo fue la figura), pero Ménez realmente pinta para volverse rápidamente el heredero de Francesco Totti, quien por encima hoy, al momento de salir remplazado, le entregó el brazalete de capitán.
El vaso medio lleno son los tres puntos, llegados a pesar de tan mala performance y que le permiten al equipo de la capital quedar por lo menos a tiro de la zona Champions. Pero el próximo sábado, en San Siro ante Milan, servirá mucho más que lo mostrado hoy.
| GOLES | |
| AS Roma | Bari |
| Francesco Totti (pen fallado 20) | |
| Juan (30) | |
| ESTADÍSTICAS DEL PARTIDO | ||
| AS Roma | Bari | |
| Disparos (al arco) | 18(6) | 7(1) |
| Faltas | 16 | 20 |
| Tiros de Esquina | 8 | 3 |
| Fuera de Juego | 0 | 5 |
| Tiempo de Posesión | 52% | 48% |
| Tarjetas Amarillas | 3 | 2 |
| Tarjetas Rojas | 0 | 0 |
| Atajadas | 1 | 5 |
Juventus 2 - 1 Lazio
ROMA - En el partido que cerró la fecha 16 del Calcio (falta Inter vs. Cesena, que se jugará el 19 de enero), disputado en el Olímpico de Turín, Juventus venció por 2 a 1 a Lazio.
Giorgio Chiellini puso arriba al local, Mauro Zárate anotó el empate transitorio y la figura del partido, Milos Krasic, en tiempo de descuento selló el triunfo, si bien en realidad se trató de un gol en contra de Fernando Muslera.
Con este resultado, Juventus alcanza a Lazio y Nápoli en la segunda posición de la tabla, todos ellos con 30 puntos, a seis unidades de distancia del único puntero, Milan.
El triunfo de Juventus fue correcto: en el marco de un partido muy equilibrado, Juventus creyó más en la victoria y no es casualidad que sus goles hayan llegado al primero y al último minuto de juego. Lazio sufrió mucho la ausencia de Radu, suspendido, porque Cavanda padeció muchísimo las inciativas de Krasic, imparable por el carril derecho.
El partido pareció ponerse enseguida muy favorable para Juventus, porque en la primer jugada Iaquinta se ganó un tiro de esquina y luego, cuando llegó el centro desde el córner, Chiellini cabeceó de manera imperiosa e inatajable al gol.
Pero Lazio se sobrepuso enseguida a la adversidad y comenzó a escalar posiciones en la cancha. El empate llegó al minuto 14, también en jugada de tiro de esquina: la defensa no despejó, la pelota quedó en el área y Zárate fue el más rápido para reaccionar y mandarla a guardar.
A partir de ese momento, comenzó un partido más táctico y razonado que bien jugado. Krasic, el único jugador realmente distinto que tiene Juventus, volvía loco a Cavanda por derecha, pero sus centros raras veces eran exactos y, cuando lograba la necesaria precisión, el rubio alero no encontraba la colaboración de los compañeros de ataque.
Lazio, por su parte, maniobraba algo mejor pero bastante más lento, por culpa de un Hernanes por momentos bastante egoista, siempre demasiado ligado a la pelota, que le sacaba velocidad y brillo a las jugadas visitantes.
Las ocasiones más peligrosas fueron para Juventus, un remate de Krasic desde la medialuna que voló apenas arriba del travesaño y un remate a girar de Marchisio, muy lindo, que salió acariciando el cruce de los leños.
En la segunda etapa, todo siguió prácticamente igual, hasta el cuarto de hora, cuando se lesionó Biava y tuvo que ser remplazado por Diakité. El cambio disminuyó la solidez defensiva visitante, pero más por un problema de confianza que por otra cosa, puesto que el recién ingresado no cometió errores graves.
Si bien el partido seguía parejo, la sensación era que Juventus lo podía ganar en cualquier momento, porque en realidad era el único que buscaba con continuidad, máxime luego de los ingresos de Pepe y del Piero. Lazio tuvo una chance, un cabezazo de Dias en jugada de tiro de esquina, pero en general mostró poca audacia y se limitó a aguantar los embistes cada vez más furiosos del local.
El premio, merecido por cierto, llegó al último segundo de los cuatro minutos de descuento concedidos por Tagliavento, árbitro del partido: Sissoko la metió profunda para Krasic y el rubio se le fue a Cavanda paralelo a la línea de fondo, para luego meter un remate que Muslera trató de sacar pero teminó enviando al fondo del saco.
La repetición desde el lateral, justo detrás de Krasic, demostró que el balón no se metía sin el manotazo del guardavalla, pero de cualquier manera el serbio se mereció, por todo lo realizado y por su búsqueda incansable, el dulce premio de ser el hombre que decidió el match.
Está claro que Milan salió favorecido de este resultado, pero hasta por ahí no más, porque este enfrentamiento directo parece demostar que, si bien en el marco de una gran paridad, Juventus tiene mejores argumentos que Lazio para pelearle el título al rossonero, que de cualquer manera, con un triunfo más en cualquiera de los próximos tres partidos, se garantizará el título de "campeón de Invierno", es decir puntero al cabo de la primera rueda.
Giorgio Chiellini puso arriba al local, Mauro Zárate anotó el empate transitorio y la figura del partido, Milos Krasic, en tiempo de descuento selló el triunfo, si bien en realidad se trató de un gol en contra de Fernando Muslera.
Con este resultado, Juventus alcanza a Lazio y Nápoli en la segunda posición de la tabla, todos ellos con 30 puntos, a seis unidades de distancia del único puntero, Milan.
El triunfo de Juventus fue correcto: en el marco de un partido muy equilibrado, Juventus creyó más en la victoria y no es casualidad que sus goles hayan llegado al primero y al último minuto de juego. Lazio sufrió mucho la ausencia de Radu, suspendido, porque Cavanda padeció muchísimo las inciativas de Krasic, imparable por el carril derecho.
El partido pareció ponerse enseguida muy favorable para Juventus, porque en la primer jugada Iaquinta se ganó un tiro de esquina y luego, cuando llegó el centro desde el córner, Chiellini cabeceó de manera imperiosa e inatajable al gol.
Pero Lazio se sobrepuso enseguida a la adversidad y comenzó a escalar posiciones en la cancha. El empate llegó al minuto 14, también en jugada de tiro de esquina: la defensa no despejó, la pelota quedó en el área y Zárate fue el más rápido para reaccionar y mandarla a guardar.
A partir de ese momento, comenzó un partido más táctico y razonado que bien jugado. Krasic, el único jugador realmente distinto que tiene Juventus, volvía loco a Cavanda por derecha, pero sus centros raras veces eran exactos y, cuando lograba la necesaria precisión, el rubio alero no encontraba la colaboración de los compañeros de ataque.
Lazio, por su parte, maniobraba algo mejor pero bastante más lento, por culpa de un Hernanes por momentos bastante egoista, siempre demasiado ligado a la pelota, que le sacaba velocidad y brillo a las jugadas visitantes.
Las ocasiones más peligrosas fueron para Juventus, un remate de Krasic desde la medialuna que voló apenas arriba del travesaño y un remate a girar de Marchisio, muy lindo, que salió acariciando el cruce de los leños.
En la segunda etapa, todo siguió prácticamente igual, hasta el cuarto de hora, cuando se lesionó Biava y tuvo que ser remplazado por Diakité. El cambio disminuyó la solidez defensiva visitante, pero más por un problema de confianza que por otra cosa, puesto que el recién ingresado no cometió errores graves.
Si bien el partido seguía parejo, la sensación era que Juventus lo podía ganar en cualquier momento, porque en realidad era el único que buscaba con continuidad, máxime luego de los ingresos de Pepe y del Piero. Lazio tuvo una chance, un cabezazo de Dias en jugada de tiro de esquina, pero en general mostró poca audacia y se limitó a aguantar los embistes cada vez más furiosos del local.
El premio, merecido por cierto, llegó al último segundo de los cuatro minutos de descuento concedidos por Tagliavento, árbitro del partido: Sissoko la metió profunda para Krasic y el rubio se le fue a Cavanda paralelo a la línea de fondo, para luego meter un remate que Muslera trató de sacar pero teminó enviando al fondo del saco.
La repetición desde el lateral, justo detrás de Krasic, demostró que el balón no se metía sin el manotazo del guardavalla, pero de cualquier manera el serbio se mereció, por todo lo realizado y por su búsqueda incansable, el dulce premio de ser el hombre que decidió el match.
Está claro que Milan salió favorecido de este resultado, pero hasta por ahí no más, porque este enfrentamiento directo parece demostar que, si bien en el marco de una gran paridad, Juventus tiene mejores argumentos que Lazio para pelearle el título al rossonero, que de cualquer manera, con un triunfo más en cualquiera de los próximos tres partidos, se garantizará el título de "campeón de Invierno", es decir puntero al cabo de la primera rueda.
| GOLES | |
| Juventus | Lazio |
| Giorgio Chiellini (2) | Mauro Zárate (14) |
| Milos Krasic (90) | |
| Fernando Muslera (og 90) | |
| ESTADÍSTICAS DEL PARTIDO | ||
| Juventus | Lazio | |
| Disparos (al arco) | 23(6) | 11(3) |
| Faltas | 7 | 9 |
| Tiros de Esquina | 7 | 5 |
| Fuera de Juego | 3 | 1 |
| Tiempo de Posesión | 52% | 48% |
| Tarjetas Amarillas | 1 | 2 |
| Tarjetas Rojas | 0 | 0 |
| Atajadas | 2 | 5 |
Genoa 0 - 1 Napoli
ROMA - Fue una verdadera batalla, con mucha más lucha y fuerza que juego y calidad: al final, Nápoli salió victorioso por la mínima diferencia, gracias al gol de Marek Hamsik, mientras que Genoa se quedó con nada.
Una victoria, la de Nápoli, de importancia fundamental: como será que ahora el Burro Celeste suma 30 puntos y alcanzó a Lazio en la segunda posición, obviamente con un partido más que el equipo de la capital. Genoa, por su parte, sigue teniendo 21 unidades y ocupa la décima plaza de la tabla.
Decíamos de una verdadera batalla: en una cancha muy pesada, Genoa recurrió a la dinámica y a la intensidad tratando de llevarse por delante a su rival, que sin embargo reaccionó bien y, luego de aguantar el embiste, puso una pizca más de fútbol y se llevó un triunfo estrecho pero plenamente merecido.
En la primera etapa, Nápoli fue bastante más que el rival, porque trató de jugar con velocidad cada vez que tuvo la pelota y mostró tener mucha más variantes que el local, que como quedó dicho trató de usar la fuerza y la dinámica como únicos argumentos.
De cualquier manera, y en un partido así no podía ser de otra manera, el gol que a la postre resultó decisivo llegó en jugada de pelota parada: Gárgano ejecutó un tiro libre desde la derecha y Hamsik lo madrugó a Veloso, cabeceando al gol de manera hermosa e inatajable.
La reacción de Genoa fue aún más rabiosa, pero poco productiva, puesto que el argumento táctico preferido por los azulgranas fue siempre el centro a la olla, buscando la cabeza de Toni, de enorme tarea, porque a pesar de tener que luchar siempre con por lo menos dos centrales (a veces tres), se las ingenió para crear peligro y permitirle subir a su equipo, al punto de merecerse la mención de figura de la cancha.
En la segunda etapa, Ballardini dejó en el vestuario a Veloso y Palladino para darles espacio a Mesto y Rudolf. Pero el escenario cambió pcoo: Genoa buscando con furia y sin ideas, Nápoli aguantando cada vez más lejos del arco de enfrente.
Genoa tuvo algunas ocasiones, como cuando Ranocchia, Toni y Dainelli se molestaron entre sí en jugada de pelota parada y no pudieron aprovechar un balón perdido, o cuando Rudolf le sirvió una buena asistencia a Mesto, que pateó apenas desviado.
Con el transcurrir de los minutos, el partido se pareció cada vez más a una batalla, por encima con un referí que demostró poca uniformidad en las decisiones. Por eso se fue expulsado Pazienza, pero si el referí hubiera juzgado siempre con la misma vara, el partido habría acabado 8 contra 8. A como sea, Nápoli aguantó con garra y corazón y ahora festeja en segundo puesto que es el justo premio a su quinto triunfo como visitante.
Una victoria, la de Nápoli, de importancia fundamental: como será que ahora el Burro Celeste suma 30 puntos y alcanzó a Lazio en la segunda posición, obviamente con un partido más que el equipo de la capital. Genoa, por su parte, sigue teniendo 21 unidades y ocupa la décima plaza de la tabla.
Decíamos de una verdadera batalla: en una cancha muy pesada, Genoa recurrió a la dinámica y a la intensidad tratando de llevarse por delante a su rival, que sin embargo reaccionó bien y, luego de aguantar el embiste, puso una pizca más de fútbol y se llevó un triunfo estrecho pero plenamente merecido.
En la primera etapa, Nápoli fue bastante más que el rival, porque trató de jugar con velocidad cada vez que tuvo la pelota y mostró tener mucha más variantes que el local, que como quedó dicho trató de usar la fuerza y la dinámica como únicos argumentos.
De cualquier manera, y en un partido así no podía ser de otra manera, el gol que a la postre resultó decisivo llegó en jugada de pelota parada: Gárgano ejecutó un tiro libre desde la derecha y Hamsik lo madrugó a Veloso, cabeceando al gol de manera hermosa e inatajable.
La reacción de Genoa fue aún más rabiosa, pero poco productiva, puesto que el argumento táctico preferido por los azulgranas fue siempre el centro a la olla, buscando la cabeza de Toni, de enorme tarea, porque a pesar de tener que luchar siempre con por lo menos dos centrales (a veces tres), se las ingenió para crear peligro y permitirle subir a su equipo, al punto de merecerse la mención de figura de la cancha.
En la segunda etapa, Ballardini dejó en el vestuario a Veloso y Palladino para darles espacio a Mesto y Rudolf. Pero el escenario cambió pcoo: Genoa buscando con furia y sin ideas, Nápoli aguantando cada vez más lejos del arco de enfrente.
Genoa tuvo algunas ocasiones, como cuando Ranocchia, Toni y Dainelli se molestaron entre sí en jugada de pelota parada y no pudieron aprovechar un balón perdido, o cuando Rudolf le sirvió una buena asistencia a Mesto, que pateó apenas desviado.
Con el transcurrir de los minutos, el partido se pareció cada vez más a una batalla, por encima con un referí que demostró poca uniformidad en las decisiones. Por eso se fue expulsado Pazienza, pero si el referí hubiera juzgado siempre con la misma vara, el partido habría acabado 8 contra 8. A como sea, Nápoli aguantó con garra y corazón y ahora festeja en segundo puesto que es el justo premio a su quinto triunfo como visitante.
| GOLES | |
| Genoa | Napoli |
| Marek Hamsik (25) | |
| ESTADÍSTICAS DEL PARTIDO | ||
| Genoa | Napoli | |
| Disparos (al arco) | 15(1) | 4(2) |
| Faltas | 19 | 15 |
| Tiros de Esquina | 6 | 2 |
| Fuera de Juego | 2 | 4 |
| Tiempo de Posesión | 59% | 41% |
| Tarjetas Amarillas | 1 | 3 |
| Tarjetas Rojas | 0 | 1 |
| Atajadas | 1 | 1 |
Brescia 1 - 0 Sampdoria
ROMA - Brescia, en el día del debut de su nuevo entrenador, Mario Beretta, le ganó de local a Sampdoria por 1 a 0, gracias al gol de Nicolás Córdoba y, de esta manera, sigue compartiendo con Lecce la 17ª plaza de la tabla, pero ahora con 15 puntos. Los dorianos, por su parte, se quedaron parados con 23 unidades y se ubican junto a Udinese e Inter (un partido menos) en el séptimo escalón de la clasificación.
El partido fue muy intenso sobre el plano físico, con los locales jugando bastante duro y los blucerchiati respondiendo a tono. En este marco, al final la diferencia la hizo un error clamoroso, exactamente el que cometió Curci en ocasión del gol de Córdova.
En efecto, el chileno anotó el tanto del 1 a 0, a la postre decisivo, directamente en jugada de tiro libre con un disparo fuerte pero central, que pudo meterse en el fondo de la red únicamente porque Curci quiso despejar con un pie, pero terminó por pifiar de manera bochornosa el balón .
La ventaja, que llegó al minuto 13, trabó el match: las Golondrinas, por su lado, defendieron con todo el resultado que para ellos era fundamental, mientras que Sampdoria, con los grandes problemas ofensivos evidenciados en esta temporada, encontró serias dificultades para abril la extrema defensa de Brescia.
Así, en el primer tiempo pasó poco y nada, con la visita mostrándose solamente con un par de jugadas de pelota parada y Brescia cerca del segundo en una única ocasión, en la que los jugadores locales movieron la pelota de un alado para el otro adentro del área pero nunca lograron rematar con eficacia hacia el arco.
El segundo tiempo se abrió con un buen remate de Diamanti, pero fue la única cosa que los hombres de Beretta lograron construir en ataque en ese tiempo. En efecto, por el resto se vio sólo el conjunto de Génova, que jugó establemente en la mitad de la cancha adversaria, arrinconando a las Golondrinas.
Sin embargo, la Samp al final logró crear apenas tres buenas chances, una con un gran remate de media vuelta de Pazzini y otras dos con golpes de cabeza de Koman y Marilungo: una vez el balón terminó de poco a lado, las otras dos tapó con seguridad Matteo Sereni, quien en la ocasión del "nueve" doriano realmente se pasó con un grande salto hacia su izquierda.
Así, como el arquero local salvó el resultado de un partido que, como quedó dicho, fue decidido por un error del otro portero, el blucerchiato, al final Sereni se ganó la mención de figura de la cancha, porque fue el único que supo mostrar algo de particular para merecérselo.
En fin, el cambio de banco le dio ese empujón anímico que Brescia necesitaba, que fue tan fuerte que les permitió a las Golondrinas sumar tres puntos en el que fue sin dudas su peor partido en esta temporada.
El partido fue muy intenso sobre el plano físico, con los locales jugando bastante duro y los blucerchiati respondiendo a tono. En este marco, al final la diferencia la hizo un error clamoroso, exactamente el que cometió Curci en ocasión del gol de Córdova.
En efecto, el chileno anotó el tanto del 1 a 0, a la postre decisivo, directamente en jugada de tiro libre con un disparo fuerte pero central, que pudo meterse en el fondo de la red únicamente porque Curci quiso despejar con un pie, pero terminó por pifiar de manera bochornosa el balón .
La ventaja, que llegó al minuto 13, trabó el match: las Golondrinas, por su lado, defendieron con todo el resultado que para ellos era fundamental, mientras que Sampdoria, con los grandes problemas ofensivos evidenciados en esta temporada, encontró serias dificultades para abril la extrema defensa de Brescia.
Así, en el primer tiempo pasó poco y nada, con la visita mostrándose solamente con un par de jugadas de pelota parada y Brescia cerca del segundo en una única ocasión, en la que los jugadores locales movieron la pelota de un alado para el otro adentro del área pero nunca lograron rematar con eficacia hacia el arco.
El segundo tiempo se abrió con un buen remate de Diamanti, pero fue la única cosa que los hombres de Beretta lograron construir en ataque en ese tiempo. En efecto, por el resto se vio sólo el conjunto de Génova, que jugó establemente en la mitad de la cancha adversaria, arrinconando a las Golondrinas.
Sin embargo, la Samp al final logró crear apenas tres buenas chances, una con un gran remate de media vuelta de Pazzini y otras dos con golpes de cabeza de Koman y Marilungo: una vez el balón terminó de poco a lado, las otras dos tapó con seguridad Matteo Sereni, quien en la ocasión del "nueve" doriano realmente se pasó con un grande salto hacia su izquierda.
Así, como el arquero local salvó el resultado de un partido que, como quedó dicho, fue decidido por un error del otro portero, el blucerchiato, al final Sereni se ganó la mención de figura de la cancha, porque fue el único que supo mostrar algo de particular para merecérselo.
En fin, el cambio de banco le dio ese empujón anímico que Brescia necesitaba, que fue tan fuerte que les permitió a las Golondrinas sumar tres puntos en el que fue sin dudas su peor partido en esta temporada.
| GOLES | |
| Brescia | Sampdoria |
| Nicolas Cordova (13) | |
| ESTADÍSTICAS DEL PARTIDO | ||
| Brescia | Sampdoria | |
| Disparos (al arco) | 5(2) | 18(4) |
| Faltas | 22 | 13 |
| Tiros de Esquina | 1 | 8 |
| Fuera de Juego | 3 | 1 |
| Tiempo de Posesión | 39% | 61% |
| Tarjetas Amarillas | 2 | 1 |
| Tarjetas Rojas | 0 | 0 |
| Atajadas | 4 | 1 |
Lecce 3 - 2 Chievo Verona
ROMA - En el estadio Via del Mare, Lecce recibió a Chievo y le ganó por 3 a 2 en un partido bello y emocionante, del que Ignacio Piatti fue la gran figura, anotando dos goles, el del momentáneo 2 a 0 y el del provisorio 3 a 1. Los otros tantos fueron de Edward Ofere para los locales y Mariano Bogliacino y Davide Mandelli para los azul y oro.
De esta manera, los rojoamarillos siguen decimoséptimos junto a Brescia, pero ahora con 15 puntos en la tabla, mientras que el conjunto de Pioli, por su parte, se quedaron con 20 unidades y fueron alcanzados por Cagliari en el onceavo escalón de la clasificación.
El resultado final fue algo mentiroso, porque en realidad los locales hubieran merecido vencer con un resultado más contundente, puesto que dominaron ampliamente toda la primera etapa, sumaron muchísimas ocasiones y concedieron bastante poco, sufriendo los dos goles de Chievo en las que fueron dos de las pocas jugadas de la visita.
Lecce, con Piatti, Di Michele, Olivera y Ofere bajó a la cancha para atacar y lastimar y, en efecto, así, fue desde el principio, con los rojoamarillos empujando con constancia y calidad, dirigidos magistralmente por un Piatti muy inspirado.
Así, ya al cuarto de hora llegó el 1 a 0, con un gran gol de Ofere: el delantero recibió sobre la trescuartos, se sacudió de encima con grande fuerza física un adversario, encaró hacia el arco y, desde unos cinco metros afuera del área, despachó un derechazo rasante que se metió en el ángulo bajo del poste a su derecha, con la complicidad del portero rival, algo lento en tirarse al piso.
Sin embargo, a pesar del grande dominio y del buen fútbol de los muchachos de De Canio, hubo que esperar hasta el último minuto de esa etapa para ver el 2 a 0.
El gol lo selló Piatti, quien definió una grandísima jugada de todo el equipo con un derechazo de volea muy afortunado, puesto que el argentino mordió el remate pero la pelota rebotó en el piso, se fue para arriba, lo pasó a Sorrentino, tocó el travesaño y se metió en el arco.
El complemento se abrió con algunas maniobras ofensivas muy bellas de los locales, pero fue Chievo quien logró anotar, con un tiro libre perfectamente ejecutado por Bogliacino.
La reacción de Lecce fue inmediata: los rojoamarillos se tiraron con todo hacia adelante, crearon algunas buenas ocasiones y al minuto 69 lograron anotar nuevamente, otra vez con Piatti. En esta ocasión, pero, el argentino no fue afortunado sino realmente hábil: gambeteó un par de hombres al límite del área, se llevó el balón de izquierda para derecha y con un diagonal preciso la mandó a guardar.
Los locales siguieron atacando y creando chances, que pero erraron puntualmente. A esa esterilidad se contrapuso la grande efectividad de los azul y oro, que metieron el segundo justo al último minuto, cuando Mandelli aprovechó un clamoroso error de Rosati, quien se dejó escapar el esférico tras un remate desde tiro libre, para anotar el 3 a 2 con el arco prácticamente libre.
De todas maneras, ese tanto no le alcanzó a Chievo (evidentemente cansado por haber jugado tres partidos en siete días) para remontar el marcador y, al final, Lecce pudo regresar al triunfo, sumando tres puntos muy importantes en clave permanencia.
De esta manera, los rojoamarillos siguen decimoséptimos junto a Brescia, pero ahora con 15 puntos en la tabla, mientras que el conjunto de Pioli, por su parte, se quedaron con 20 unidades y fueron alcanzados por Cagliari en el onceavo escalón de la clasificación.
El resultado final fue algo mentiroso, porque en realidad los locales hubieran merecido vencer con un resultado más contundente, puesto que dominaron ampliamente toda la primera etapa, sumaron muchísimas ocasiones y concedieron bastante poco, sufriendo los dos goles de Chievo en las que fueron dos de las pocas jugadas de la visita.
Lecce, con Piatti, Di Michele, Olivera y Ofere bajó a la cancha para atacar y lastimar y, en efecto, así, fue desde el principio, con los rojoamarillos empujando con constancia y calidad, dirigidos magistralmente por un Piatti muy inspirado.
Así, ya al cuarto de hora llegó el 1 a 0, con un gran gol de Ofere: el delantero recibió sobre la trescuartos, se sacudió de encima con grande fuerza física un adversario, encaró hacia el arco y, desde unos cinco metros afuera del área, despachó un derechazo rasante que se metió en el ángulo bajo del poste a su derecha, con la complicidad del portero rival, algo lento en tirarse al piso.
Sin embargo, a pesar del grande dominio y del buen fútbol de los muchachos de De Canio, hubo que esperar hasta el último minuto de esa etapa para ver el 2 a 0.
El gol lo selló Piatti, quien definió una grandísima jugada de todo el equipo con un derechazo de volea muy afortunado, puesto que el argentino mordió el remate pero la pelota rebotó en el piso, se fue para arriba, lo pasó a Sorrentino, tocó el travesaño y se metió en el arco.
El complemento se abrió con algunas maniobras ofensivas muy bellas de los locales, pero fue Chievo quien logró anotar, con un tiro libre perfectamente ejecutado por Bogliacino.
La reacción de Lecce fue inmediata: los rojoamarillos se tiraron con todo hacia adelante, crearon algunas buenas ocasiones y al minuto 69 lograron anotar nuevamente, otra vez con Piatti. En esta ocasión, pero, el argentino no fue afortunado sino realmente hábil: gambeteó un par de hombres al límite del área, se llevó el balón de izquierda para derecha y con un diagonal preciso la mandó a guardar.
Los locales siguieron atacando y creando chances, que pero erraron puntualmente. A esa esterilidad se contrapuso la grande efectividad de los azul y oro, que metieron el segundo justo al último minuto, cuando Mandelli aprovechó un clamoroso error de Rosati, quien se dejó escapar el esférico tras un remate desde tiro libre, para anotar el 3 a 2 con el arco prácticamente libre.
De todas maneras, ese tanto no le alcanzó a Chievo (evidentemente cansado por haber jugado tres partidos en siete días) para remontar el marcador y, al final, Lecce pudo regresar al triunfo, sumando tres puntos muy importantes en clave permanencia.
| GOLES | |
| Lecce | Chievo Verona |
| E Ofere (16) | Mariano Bogliacino (55) |
| Ignacio Piatti (45) | Davide Mandelli (90) |
| Ignacio Piatti (69) | |
| ESTADÍSTICAS DEL PARTIDO | ||
| Lecce | Chievo Verona | |
| Disparos (al arco) | 12(7) | 11(4) |
| Faltas | 18 | 13 |
| Tiros de Esquina | 9 | 4 |
| Fuera de Juego | 5 | 4 |
| Tiempo de Posesión | 42% | 58% |
| Tarjetas Amarillas | 3 | 3 |
| Tarjetas Rojas | 0 | 0 |
| Atajadas | 2 | 4 |
Cagliari 3 - 0 Catania
ROMA - Con un gran triplete del brasileño Nené, Cagliari le ganó a Catania en el Sant'Elia por 3 a 0 y se trepó a la onceava posición de la tabla, que comparte con Chievo, ambos con 20 unidades, mientras que los sicilianos, por su parte, se quedaron con 18 puntos y ahora ocupan junto a Parma el catorceavo escalón del torneo.
El match no tuvo historia, porque los locales empezaron con un ritmo infernal, sometieron a la visita y liquidaron el match con dos goles en en menos de media hora, para luego cerrarlo definitivamente en el complemento.
Claramente, el hombre que decidió el encuentro fue el brasileño Nené, quien comenzó fallando una clara ocasión, rematando encima del portero parado a pocos metros del arco, pero luego metió un gran gol al onceavo minuto, conectando un balón rebotado sobre el travesaño (cabezazo de Matri) con una volea impresionante que no le dejó chances a Andujar.
Los sardos siguieron atacando y jugando un buen fútbol y, quince minutos más tarde, metieron el segundo: Nené recibió un centro desde la izquierda, parado cerca del segundo palo, y de cabeza la clavó en el ángulo bajo cerca del primer palo.
Enseguida después, Catania tuvo una llamarada y Gómez rozó el descuento con un gran remate desde el límite del área, con el balón que salió acariciando el palo a la derecha del portero. Pero fue la única verdadera chance de los sicilianos, que por el resto difícilmente lograron encontrar la manera justa para abrir la sólida defensa de Cagliari.
En el complemento, las cosas no cambiaron y, al revés, empeoraron para Catania, puesto que la respuesta de los jugadores de Giampaolo a los constantes ataques de Cagliari fue la expulsión de Martinho, que se mereció la roja por una terrible patada a mitad de la cancha.
Así, el gol del tres a cero, anotado otra vez de cabeza por Nené, esta vez en jugada de tiro de esquina, y la expulsión de Morimoto poco más tarde, fueron la conclusión de un partido que ya estaba cerrado y que tomó un marcador contundente, que bien reflejó la enorme diferencia que se vio en esta ocasión sobre el césped del Sant'Elia.
El match no tuvo historia, porque los locales empezaron con un ritmo infernal, sometieron a la visita y liquidaron el match con dos goles en en menos de media hora, para luego cerrarlo definitivamente en el complemento.
Claramente, el hombre que decidió el encuentro fue el brasileño Nené, quien comenzó fallando una clara ocasión, rematando encima del portero parado a pocos metros del arco, pero luego metió un gran gol al onceavo minuto, conectando un balón rebotado sobre el travesaño (cabezazo de Matri) con una volea impresionante que no le dejó chances a Andujar.
Los sardos siguieron atacando y jugando un buen fútbol y, quince minutos más tarde, metieron el segundo: Nené recibió un centro desde la izquierda, parado cerca del segundo palo, y de cabeza la clavó en el ángulo bajo cerca del primer palo.
Enseguida después, Catania tuvo una llamarada y Gómez rozó el descuento con un gran remate desde el límite del área, con el balón que salió acariciando el palo a la derecha del portero. Pero fue la única verdadera chance de los sicilianos, que por el resto difícilmente lograron encontrar la manera justa para abrir la sólida defensa de Cagliari.
En el complemento, las cosas no cambiaron y, al revés, empeoraron para Catania, puesto que la respuesta de los jugadores de Giampaolo a los constantes ataques de Cagliari fue la expulsión de Martinho, que se mereció la roja por una terrible patada a mitad de la cancha.
Así, el gol del tres a cero, anotado otra vez de cabeza por Nené, esta vez en jugada de tiro de esquina, y la expulsión de Morimoto poco más tarde, fueron la conclusión de un partido que ya estaba cerrado y que tomó un marcador contundente, que bien reflejó la enorme diferencia que se vio en esta ocasión sobre el césped del Sant'Elia.
| ESTADÍSTICAS DEL PARTIDO | ||
| Cagliari | Catania | |
| Disparos (al arco) | 11(5) | 4(0) |
| Faltas | 16 | 22 |
| Tiros de Esquina | 3 | 0 |
| Fuera de Juego | 10 | 2 |
| Tiempo de Posesión | 60% | 40% |
| Tarjetas Amarillas | 1 | 2 |
| Tarjetas Rojas | 0 | 2 |
| Atajadas | 0 | 2 |
Udinese 2 - 1 Fiorentina
ROMA - Udinese recibió a Fiorentina, en el primer partido de la fecha 16 disputado el sábado por la tarde italiana, y lo venció por 2 a 1: Mario Santana abrió el marcador, pero el local lo pudo dar vuelta con el primer gol en Serie A del colombiano Pablo Armero y un tanto del implacable goleador Antonio Di Natale.
Con este resultado, Udinese suma 23 unidades y se suma al lote de los sextos, integrado también por Inter, Sampdoria y Roma, obviamente con un partido más que el resto, mientras que Fiorentina sigue teniendo 19 y ocupa en soledad la doceava plaza.
El resultado fue correcto: la ventaja inicial de la visita, como veremos, fue producto del un grosero error del arquero local Handanovic, pero antes y después que eso Udinese dominó, reclamó un penal no concedido por un evidente falta de mano de Gamberini y terminó dándolo vuelta en el complemento con dos golazos.
Udinese dominó desde un comienzo, de la mano de un chileno Sánchez imposible de frenar, por lejos la gran figura de la cancha. Pero, luego de media hora de superioridad abrumadora, Santana probó un remate violento pero sin muchas pretensiones, que sin embargo contó con el "pato" de Handanovic para meterse en el fondo de la red y abrir el marcador.
Sobre el final de la etapa, Udinese protestó largamente, primero por la falta de Kroldrup contra Inler en el área y aún más por el "bloqueo" de Gamberini, una falta de mano grosera y evidente que sólo el referí Di Marco no logró apreciar. La pizarra, al momento de irse al descanso, no podía ser más injusta.
Sin embargo, Udinese no aflojó y mostró en el complemento la misma superioridad evidenciada en el primer tiempo, creando varias jugadas de gol. Así, luego de 18 minutos, llegó el empate, una obra maestra de Armero, quien despachó un remate violento y preciso, realmente un golazo, la mejor manera de comenzar su aventura goleadora en el Calcio.
El empate les dio aún más ánimo a los locales y el protagonista del triunfo no podía que ser él, Di Natale, el gran goleador. La asistencia de Denis fue perfecta, el remate de Totó quirúrgico, la ventaja y relativa victoria absolutamente correctas. Por una vez, el talento pudo más que la mala suerte y un pésimo referí.
Con este resultado, Udinese suma 23 unidades y se suma al lote de los sextos, integrado también por Inter, Sampdoria y Roma, obviamente con un partido más que el resto, mientras que Fiorentina sigue teniendo 19 y ocupa en soledad la doceava plaza.
El resultado fue correcto: la ventaja inicial de la visita, como veremos, fue producto del un grosero error del arquero local Handanovic, pero antes y después que eso Udinese dominó, reclamó un penal no concedido por un evidente falta de mano de Gamberini y terminó dándolo vuelta en el complemento con dos golazos.
Udinese dominó desde un comienzo, de la mano de un chileno Sánchez imposible de frenar, por lejos la gran figura de la cancha. Pero, luego de media hora de superioridad abrumadora, Santana probó un remate violento pero sin muchas pretensiones, que sin embargo contó con el "pato" de Handanovic para meterse en el fondo de la red y abrir el marcador.
Sobre el final de la etapa, Udinese protestó largamente, primero por la falta de Kroldrup contra Inler en el área y aún más por el "bloqueo" de Gamberini, una falta de mano grosera y evidente que sólo el referí Di Marco no logró apreciar. La pizarra, al momento de irse al descanso, no podía ser más injusta.
Sin embargo, Udinese no aflojó y mostró en el complemento la misma superioridad evidenciada en el primer tiempo, creando varias jugadas de gol. Así, luego de 18 minutos, llegó el empate, una obra maestra de Armero, quien despachó un remate violento y preciso, realmente un golazo, la mejor manera de comenzar su aventura goleadora en el Calcio.
El empate les dio aún más ánimo a los locales y el protagonista del triunfo no podía que ser él, Di Natale, el gran goleador. La asistencia de Denis fue perfecta, el remate de Totó quirúrgico, la ventaja y relativa victoria absolutamente correctas. Por una vez, el talento pudo más que la mala suerte y un pésimo referí.
| GOLES | |
| Udinese | Fiorentina |
| Pablo Armero (63) | Mario Santana (31) |
| Antonio Di Natale (80) | |
| ESTADÍSTICAS DEL PARTIDO | ||
| Udinese | Fiorentina | |
| Disparos (al arco) | 21(5) | 7(2) |
| Faltas | 7 | 16 |
| Tiros de Esquina | 5 | 5 |
| Fuera de Juego | 7 | 2 |
| Tiempo de Posesión | 60% | 40% |
| Tarjetas Amarillas | 2 | 6 |
| Tarjetas Rojas | 0 | 0 |
| Atajadas | 1 | 3 |
Palermo 3 - 1 Parma
ROMA - Parma comenzó mejor y se puso en ventaja con un gol de Alessandro Lucarelli, pero Palermo pudo darlo vuelta con los tantos de Mauricio Pinilla, Fabrizio Miccoli y uno en contra de Christian Zaccardo, que selló el 3 a 1 definitivo. Esto fue lo que ocurrió en el primer partido de la fecha 16 del Calcio, disputado el sábado en el estadio Barbera.
Con este resultado, Palermo suma 26 puntos y quedó en la quinta posición de la tabla, mientras que Parma sigue teniendo 18 unidades y compartiendo con Catania, obviamente con un partido más, la treceava plaza del torneo.
El resultado fue justo, si bien el último gol selló un marcador demasiado severo con la visita, que fue más en la primera etapa y, luego de ponerse en ventaja, pudo hasta haber aumentado. Fue decisivo el ingreso del chileno Pinilla por un deslucido Pastore, muy lejos de su mejor nivel.
En efecto, luego de un buen comienzo local, Parma se puso arriba casi de casualidad: un tiro de esquina desde la derecha, ejecutado en forma de centro, encontró la cabeza de Lucarelli, quien se había liberado muy bien de la marca de Balzaretti, y el arquero Sirigu no pudo nada ante el cabezazo de pique al suelo del defensor visitante.
Como suele pasar, luego de haber conseguido la ventaja Parma la justificó con un buen juego y algunas otras ocasiones: la más clara estuvo en los pies de Angelo, habilitado de manera genial por Hernán Crespo, pero el lateral controló mal, perdió un tiempo esencial y su remate salió apenas desviado.
Palermo no aparecía, porque Parma cerraba muy bien las líneas y Pastore no encontraba la posición correcta en la cancha, siempre bien tomado por los rivales. Recién sobre el final de la etapa, el argentino pareció encontrar un buen lugar por derecha y desde ahí creó el único peligro, un centro rasante que Ilicic no supo aprovechar.
De cualquier manera, Pastore se mostraba desganado y casi resignado y así, luego del descanso, Delio Rossi decidió sacarlo para poner a Pinilla, una sustitución arriesgada que, sin embargo, al final resultó correcta y decisiva. En efecto, Pinilla aportó mucha más velocidad a la maniobra y los efectos de su presencia no tardaron en llegar.
Fue una linda percusión central de Nocerino la que trajo el primer gol: el volante, llegado al borde del área, cerró la pared con Ilicic, quien la devolvió de taco, y remató sobre la salida de Mirante. El balón le quedó otra vez a él y entonces Nocerino puso la asistencia hacia el medio para el ingreso de Pinilla, quien no tuvo problemas para mandarla a guardar en el arco vacío.
El empate les puso las alas a los locales, que en pocos minutos encontraron el segundo: Bacinovic puso un largo pelotazo, Pinilla la bajó muy bien de frente para Miccoli, quien despachó un derechazo esquinado y venenoso que picó justo antes de meterse al arco, dejando sin respuestas a Mirante.
Parma reaccionó y hasta pudo haber empatado: en ese momento, fue decisivo Sirigu, quien le negó el gol a Crespo de manera espectacular, en ocasión de un remate a quemarropa, desde el borde del área chica, que el arquero desvió al córner con un manotazo milagroso.
Luego, en el final, el gol en contra: Ilicic metió el centro desde la derecha y Zaccardo, famoso por el gol en contra con la camiseta azzurra en el Mundial 2006 ante Estados Unidos, en el afán de anticiparse al jovencito Kasami, recién ingresado, cabeceó en el ángulo superior izuqierdo, un remate inatajable.
Con este resultado, Palermo suma 26 puntos y quedó en la quinta posición de la tabla, mientras que Parma sigue teniendo 18 unidades y compartiendo con Catania, obviamente con un partido más, la treceava plaza del torneo.
El resultado fue justo, si bien el último gol selló un marcador demasiado severo con la visita, que fue más en la primera etapa y, luego de ponerse en ventaja, pudo hasta haber aumentado. Fue decisivo el ingreso del chileno Pinilla por un deslucido Pastore, muy lejos de su mejor nivel.
En efecto, luego de un buen comienzo local, Parma se puso arriba casi de casualidad: un tiro de esquina desde la derecha, ejecutado en forma de centro, encontró la cabeza de Lucarelli, quien se había liberado muy bien de la marca de Balzaretti, y el arquero Sirigu no pudo nada ante el cabezazo de pique al suelo del defensor visitante.
Como suele pasar, luego de haber conseguido la ventaja Parma la justificó con un buen juego y algunas otras ocasiones: la más clara estuvo en los pies de Angelo, habilitado de manera genial por Hernán Crespo, pero el lateral controló mal, perdió un tiempo esencial y su remate salió apenas desviado.
Palermo no aparecía, porque Parma cerraba muy bien las líneas y Pastore no encontraba la posición correcta en la cancha, siempre bien tomado por los rivales. Recién sobre el final de la etapa, el argentino pareció encontrar un buen lugar por derecha y desde ahí creó el único peligro, un centro rasante que Ilicic no supo aprovechar.
De cualquier manera, Pastore se mostraba desganado y casi resignado y así, luego del descanso, Delio Rossi decidió sacarlo para poner a Pinilla, una sustitución arriesgada que, sin embargo, al final resultó correcta y decisiva. En efecto, Pinilla aportó mucha más velocidad a la maniobra y los efectos de su presencia no tardaron en llegar.
Fue una linda percusión central de Nocerino la que trajo el primer gol: el volante, llegado al borde del área, cerró la pared con Ilicic, quien la devolvió de taco, y remató sobre la salida de Mirante. El balón le quedó otra vez a él y entonces Nocerino puso la asistencia hacia el medio para el ingreso de Pinilla, quien no tuvo problemas para mandarla a guardar en el arco vacío.
El empate les puso las alas a los locales, que en pocos minutos encontraron el segundo: Bacinovic puso un largo pelotazo, Pinilla la bajó muy bien de frente para Miccoli, quien despachó un derechazo esquinado y venenoso que picó justo antes de meterse al arco, dejando sin respuestas a Mirante.
Parma reaccionó y hasta pudo haber empatado: en ese momento, fue decisivo Sirigu, quien le negó el gol a Crespo de manera espectacular, en ocasión de un remate a quemarropa, desde el borde del área chica, que el arquero desvió al córner con un manotazo milagroso.
Luego, en el final, el gol en contra: Ilicic metió el centro desde la derecha y Zaccardo, famoso por el gol en contra con la camiseta azzurra en el Mundial 2006 ante Estados Unidos, en el afán de anticiparse al jovencito Kasami, recién ingresado, cabeceó en el ángulo superior izuqierdo, un remate inatajable.
| OLES | |
| Palermo | Parma |
| Mauricio Ferreira Pinilla (51) | Alessandro Lucarelli (7) |
| Fabrizio Miccoli (61) | |
| Cristian Zaccardo (og 89) | |
| ESTADÍSTICAS DEL PARTIDO | ||
| Palermo | Parma | |
| Disparos (al arco) | 22(4) | 10(4) |
| Faltas | 15 | 9 |
| Tiros de Esquina | 3 | 4 |
| Fuera de Juego | 0 | 3 |
| Tiempo de Posesión | 54% | 46% |
| Tarjetas Amarillas | 0 | 3 |
| Tarjetas Rojas | 0 | 0 |
| Atajadas | 3 | 2 |
| 12 de diciembre de 2010Serie A de Italia 2010/2011 Tabla de posiciones | |||||||||||||||||||||||
| General | Local | Visitante | |||||||||||||||||||||
| Pos. | EQUIPO | Pts. | PJ | G | E | P | F | F | Dif. | G | E | P | F | F | G | E | P | F | F | ||||
| 1 |  | AC Milan | 36 | 16 | 11 | 3 | 2 | 29 | 12 | 17 | 6 | 1 | 1 | 17 | 5 | 5 | 2 | 1 | 12 | 7 | |||
| 2 |  | Juventus | 30 | 16 | 8 | 6 | 2 | 31 | 16 | 15 | 4 | 3 | 1 | 19 | 12 | 4 | 3 | 1 | 12 | 4 | |||
| 3 | | Napoli | 30 | 16 | 9 | 3 | 4 | 25 | 17 | 8 | 4 | 1 | 2 | 13 | 8 | 5 | 2 | 2 | 12 | 9 | |||
| 4 |  | Lazio | 30 | 16 | 9 | 3 | 4 | 21 | 14 | 7 | 5 | 2 | 1 | 13 | 7 | 4 | 1 | 3 | 8 | 7 | |||
| 5 | | Palermo | 26 | 16 | 8 | 2 | 6 | 28 | 21 | 7 | 5 | 2 | 2 | 17 | 9 | 3 | 0 | 4 | 11 | 12 | |||
| 6 | | AS Roma | 26 | 16 | 7 | 5 | 4 | 21 | 20 | 1 | 6 | 2 | 0 | 13 | 5 | 1 | 3 | 4 | 8 | 15 | |||
| 7 | | Inter Milan | 23 | 15 | 6 | 5 | 4 | 20 | 14 | 6 | 3 | 3 | 1 | 13 | 6 | 3 | 2 | 3 | 7 | 8 | |||
| 8 | | Sampdoria | 23 | 16 | 5 | 8 | 3 | 18 | 13 | 5 | 3 | 4 | 1 | 9 | 4 | 2 | 4 | 2 | 9 | 9 | |||
| 9 | | Udinese | 23 | 16 | 7 | 2 | 7 | 19 | 18 | 1 | 5 | 1 | 2 | 13 | 9 | 2 | 1 | 5 | 6 | 9 | |||
| 10 | | Genoa | 21 | 16 | 6 | 3 | 7 | 13 | 15 | -2 | 3 | 1 | 4 | 6 | 9 | 3 | 2 | 3 | 7 | 6 | |||
| 11 | | Cagliari | 20 | 16 | 5 | 5 | 6 | 19 | 15 | 4 | 4 | 1 | 3 | 13 | 6 | 1 | 4 | 3 | 6 | 9 | |||
| 12 | | Chievo Verona | 20 | 16 | 5 | 5 | 6 | 18 | 18 | 0 | 3 | 3 | 2 | 8 | 7 | 2 | 2 | 4 | 10 | 11 | |||
| 13 | | Fiorentina | 19 | 16 | 5 | 4 | 7 | 16 | 17 | -1 | 5 | 1 | 2 | 10 | 6 | 0 | 3 | 5 | 6 | 11 | |||
| 14 | | Bologna | 19 | 16 | 5 | 5 | 6 | 16 | 23 | -7 | 4 | 3 | 1 | 8 | 6 | 1 | 2 | 5 | 8 | 17 | |||
| 15 | | Catania | 18 | 16 | 4 | 6 | 6 | 13 | 18 | -5 | 4 | 3 | 1 | 9 | 6 | 0 | 3 | 5 | 4 | 12 | |||
| 16 | | Parma | 18 | 16 | 4 | 6 | 6 | 14 | 20 | -6 | 3 | 4 | 1 | 7 | 4 | 1 | 2 | 5 | 7 | 16 | |||
| 17 | | Brescia | 15 | 16 | 4 | 3 | 9 | 12 | 20 | -8 | 3 | 2 | 3 | 8 | 8 | 1 | 1 | 6 | 4 | 12 | |||
| 18 | | Lecce | 15 | 16 | 4 | 3 | 9 | 16 | 33 | -17 | 4 | 2 | 2 | 12 | 11 | 0 | 1 | 7 | 4 | 22 | |||
| 19 | | Cesena | 12 | 15 | 3 | 3 | 9 | 10 | 20 | -10 | 3 | 1 | 4 | 7 | 10 | 0 | 2 | 5 | 3 | 10 | |||
| 20 | | Bari | 10 | 16 | 2 | 4 | 10 | 10 | 25 | -15 | 2 | 2 | 4 | 6 | 10 | 0 | 2 | 6 | 4 | 15 | |||
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