domingo, 19 de diciembre de 2010

Mourinho criticó a Valdano


MADRID -- José Mourinho, técnico del Real Madrid, llegó a la rueda de prensa tras el partido disputado frente al Sevilla con un folio que le prepararon en el club con lo que interpretaron como "trece errores arbitrales" de Clos Gómez durante el encuentro, y pidió una reunión inmediata con Florentino Pérez, cansado de ser él quien se lleva las sanciones por dar la cara representando a la entidad.
José Mourinho
EFEMourinho se quejó de los errores arbitrales
"Me dan una lista con trece errores graves", comenzó Mourinho en la rueda de prensa sacando un folio. "Me preguntaron si me cansaba la presión, y no me cansa porque no me siento presionado en hacer las cosas que me gustan, como es entrenar y jugar. De lo que estoy un poco cansado es que me den una lista de errores graves del árbitro y quieren que sea yo el que ataque al árbitro y defienda a mi equipo".
"Tiene que ser defendido porque lo merece hoy y muchas veces más. Si yo cojo esto y voy para adelante la historia es siempre la misma, suspensión a Mourinho. Tenemos un club, un organigrama y quiero que la gente defienda a mi equipo, no solo yo. Lo que ha pasado hoy no merece ni un comentario. Tengo un equipo de otro mundo, con un carácter de otro mundo. Con bajas importantes han conseguido lo que parecía imposible. Es una pena jugar el miércoles porque hoy se merecían irse de vacaciones", añadió.
En esta ocasión Mourinho no nombró a Jorge Valdano, director general, como lo ha hecho en tres ocasiones anteriores, ni a Miguel Pardeza, director deportivo, pero sus mensajes fueron claros, pidiendo una reunión con el presidente.
"Obviamente tengo que pedir una reunión urgente con el presidente, que es mi superior, el número uno, con el que puedo hablar directamente porque nos llevamos muy bien, tenemos una relación cercana y hablamos todas las semanas", dijo.
"Ha llegado el momento de tener una conversación abierta. Tras seis meses me encuentro en condiciones de comentar mi vida como técnico del Real Madrid. Tenemos derecho a tener diferencia de opinión en cosas. Quiero defender a mi equipo pero si cojo este folio y voy error tras error, el próximo partido no estoy en el banquillo. Lo fácil es esconderse detrás de un entrenador", agregó.
Aunque aclaró Mourinho que la situación puede arreglarse porque en el fondo existe buena relación con la gente del club. "Tengo muy buena relación personal con toda la gente del club. Podemos tener opiniones diversas y filosofías diferentes, se pueden solucionar cuando las relaciones personales son buenas".
Y se deshizo en elogios hacia sus jugadores, tras el triunfo sufrido ante el Sevilla (1-0). "Tengo un equipo fantástico, tanto titulares como suplentes. Como ha jugado Ramos que estaba muerto, Arbeloa, como ha salido Albiol, Pepe. Es una gran mentira de un profesional que quiera ganar seis millones de euros".
"Me quedo con mis jugadores. Seis meses de mucho trabajo y dedicación, con un resultado históricamente negativo (5-0 del Camp Nou), que es nuestro, pero seis meses de calidad de juego, sacrificio, entrega y grandísimos resultados. Es un orgullo enorme ser el entrenador de estos jugadores", dijo.
Aunque para Mourinho el partido fue "demasiado feo" como para analizarlo, acabó haciendo una lectura positiva refiriéndose al Barcelona.
"Deben sentir una grandísima frustración quien quería que hoy estuviéramos a cuatro o cinco puntos. Este partido nos da mucha fuerza. Si puede llamarse partido porque yo si soy espectador no pago ni un euro por verlo y en casa lo cambio y me pongo un partido del campeonato de Vietnam. Estaba todo para perder dos puntos y no los hemos perdido", manifestó.
Por último, fue crítico con la afición del Santiago Bernabéu que no llega a dar el calor que pide. "Quiero más del público pero no tengo derecho a pedir nada. Llenan siempre el campo. Son modos diferentes de estar en un estadio de fútbol, culturas diferentes. La gente no es tonta y entiende que este equipo da todo".
Por su parte, Iker Casillas afirmó que cree que el árbitro del encuentro, Clos Gómez, "no ha estado a la altura" del choque.
"Desde el primer momento la cosa se ha complicado bastante. El Sevilla se ha encerrado muy bien atrás. Ha sabido colocarse muy bien. Eso no nos ha permitido crear muchas ocasiones de gol. Quizá ha sido un partido de ida y vuelta", comentó.
"Cuando uno no está acertado no está acertado, la verdad. Es verdad que el árbitro quizá no ha estado a la altura de este partido. También en este caso Clos Gómez también ha arbitrado otros partidos bien", añadió.
"Ha habido dos o tres jugadas que no ha dialogado y creo que hablando con el jugador puedes evitar muchas cosas dentro del campo. Ha habido jugadas como la de Sergio y la mía, que yo no le digo nada y me saca amarilla. Pues muy bien. Hasta luego", apuntó.
Asimismo, declaró que el duelo ante el conjunto andaluz era "muy importante" para el futuro del Real Madrid en la Liga, y añadió que la escuadra madridista tuvo que tirar de la épicas para ganar a los hombres de Gregorio Manzano.
"Di Maria ha estado pillo y hemos conseguido tres puntos muy importantes para dejar la Liga aparcada para seguir detrás del Barcelona. La diferencia está ahí. Son dos puntos, un partido. Nosotros tenemos que seguir ganando y ellos se cansarán también de ver que el que está segundo también gana siempre y apretando detrás. Un día, como fallen, pues hay que estar ahí", concluyó.
Por su parte, Ángel Di Maria afirmó que la segunda tarjeta que recibió su compañero Ricardo Carvalho no era merecida y se mostró muy feliz por haber marcado el tanto de la victoria.
"Se ganó 1-0, con uno menos, que lo de Carvalho no era para una expulsión... pero se dio así, se ganó y lo importante es ir a ganar sea como sea y así se ha hecho. Pude convertir otra vez, lo importante es que se ganó. Jugando bien o mal había que ganar para seguir en la lucha, que era lo importante", dijo.
Sobre su gol dijo: "Tenía poco ángulo la verdad. Intenté meterla, a veces no entra, otras sí y gracias a Dios entró".
Respecto a la celebración del tanto, que se lo dedicó al portero rival, Andrés Palop, a quien durante el partido criticó por sus pérdidas de tiempo, indicó: "Ya pasó, estaba con un poco de bronca. Pero Dios es justo y pude convertir el gol".
Por último, se refirió a la lucha que mantiene el Real Madrid con el Barcelona por el primer puesto de la Liga: "No es presión, ellos también la tienen, porque nosotros seguimos ganando. La presión es de los dos y tenemos que seguir así hasta que podamos alcanzar el primer lugar", finalizó.
MANZANO: "ME VOY DECEPCIONADO"
Gregorio Manzano, técnico del Sevilla, reconoció que se marcha "decepcionado" del estadio Santiago Bernabéu, tras sufrir la quinta derrota consecutiva en Liga, pese a jugar 36 minutos ante un Real Madrid en inferioridad numérica por la expulsión de Ricardo Carvalho.
"Estamos muy tristes y dolidos por venir a una plaza como el Bernabéu, tener ocasiones claras y la expulsión de un jugador del Real Madrid y no aprovecharlo. Podríamos irnos de otra forma. Me voy decepcionado porque podíamos haber roto nuestra mala dinámica. Era un buen momento para hacerlo", lamentó el técnico sevillista.
"Me quedo con que el equipo ha luchado y plantado cara al Real Madrid. Algunos jugadores al final del partido han acusado el gran esfuerzo realizado ante el Borussia Dortmund. Con esta actitud e intensidad, difícilmente perderemos partidos", añadió.
Según Manzano, el Sevilla tuvo "en las cuerdas al Real Madrid" pero le perdonaron. "Pudimos marcar en la ocasión mas clara del partido de Negredo. El Real Madrid ha tenido poca actividad ofensiva en conjunto, sólo faltas de Cristiano Ronaldo. Hemos salido neutralizarles y nos han ganado un partido de la nada, de la jugada más intrascendente del partido".
Para Manzano, lo más justo habría sido el empate. "Cuando se quedaron con uno menos, intentamos ir por el partido pero se organizaron bien defensivamente. Teníamos que haber empatado".
Manzano no criticó a un arbitraje que generó mucha polémica en el Santiago Bernabéu. "El árbitro ha tenido un partido complicado porque el Real Madrid en algunas acciones ha trabajado de manera intensa, hay que saber pitar en el Bernabéu. Al final hemos acabado con un expulsado sin motivo, pero lo que cuenta son los goles y no el arbitraje".
Y admitió que la trifulca entre banquillos del descanso no la vio. "Entré al vestuario y no vi nada. Me dijeron que había un expulsado por cada banquillo. Antes hubo protestas del banquillo del Real Madrid en acciones de juego y respondidas por igual por el nuestro banquillo por los nervios que había".

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