miércoles, 15 de julio de 2009

Confesiones de un niño malcriado

Si LeBron James continúa por este camino, su legado podría verse afectado

--A veces un atleta lo tiene todo y no lo puede mantener.
Talento, dinero, fama y popularidad, pero ésta última es la más difícil de mantener en el tiempo si no eres auténtico. Porque tarde o temprano, "la estrella" va a mostrar la hilacha y la gente no se lo va a perdonar.
No estoy diciendo que LeBron James, de apenas 24 años, haya llegado a este punto, pero si continúa con su racha de actitudes infantiles e inmaduras, pronto pasará de ser "El Rey" a "El Bufón".
Es que LeBron, quien es tan grande que es uno de los pocos atletas a los cuales se los reconoce por apenas su primer nombre, tiene todo al alcance de su mano, pero en este momento ese todo está más lejos de lo que piensa.
No hay nadie en el mundo del básquetbol que no considere a James como un posible sucesor a Michael Jordan como el mejor jugador de todos los tiempos. Pero semejante rótulo excede las barreras del puro talento. Hay que ser un modelo a seguir para que todos los niños del mundo aspiren a "ser como Mike".
¿Perdón, dije Mike?
Debe haber sido un acto fallido, pero la realidad es que en este momento nadie quiere "ser como LeBron".
Sobre todo después de lo sucedido en la Clínica de "El Elegido" --LeBron James--, como él ingeniosamente quiso nombrarla.
Para algún desprevenido que haya llegado ayer de Neptuno, porque la realidad es que esta noticia recorrió el mundo, Jordan Crawford de la Universidad de Xavier volcó el balón en la cara de James, y lo inmortalizó en un póster que él colgaría en todas las paredes de su pieza.
Pero LeBron tenía una idea mejor...
La versión oficial indica que Nike, uno de los tantos que hacen la irrealidad de LeBron posible, fue quien ordenó confiscar el video de dicha volcada para evitar que aparezca en cuánto programa televisivo se les ocurra y que esta "humillación" de la vuelta al mundo.
Aquí es donde estoy confundido por varias cuestiones.
En primer lugar, acaso la noticia no dio la vuelta al mundo igual, y dejó aún pero parado a James.
Créanme cuando les digo que no tienen que creer todo lo que se les dice, sobre todo cuando viene de una compañía multimillonaria que quiere proteger a un niño malcriado a toda costa.
Varios testigos, incluyendo el camarógrafo que lo capturó todo en video y no pudo disfrutar de que lo documentado sea furor, Ryan Miller, admitieron que fue James quien llamó a los representates de Nike y en teoría les dijo al oído que confisquen el video.
Por supuesto que Nike va a ser el responsable en la versión oficial, porque harían cualquier cosa con tal de proteger a "El Elegido" y todos los millones de dólares que ganan a cuestas suya.
Lo cierto es que deberían haber dejado que el video se distribuya. Después de todo nadie es perfecto, a LeBron James ya le han volcado el balón en la cara --Steve Francis y Courtney Lee--, y le ha ocurrido a todos.
Ahora al confiscar los videos, yo y millones de personas más lo están criticando y lo ven como un niño inmaduro que está yendo por el camino equivocado y que parece ser más egocéntrico que cualquier otra persona en este planeta.
Para colmo, todos teníamos ganas de ver ese video. Inclusive estos chicos, que hicieron un montaje para que se den una idea de lo que fue ese momento: Ver.
En lugar de permitir que Crawford brille por aunque sea un instante, LeBron prefiere seguir manteniendo su aura aparentemente intocable.
Y lo peor de todos es que nadie lo hubiese criticado si la volcada se propagaba, porque al fin y al cabo, LeBron estaba organizando un evento que favorece el desarrollo de basquetbolistas jóvenes.
Lo más triste de todo este tema es que no es la primera vez que James toma una decisión cuestionable.
Imposible olvidarse de su decisión de no saludar a los jugadores del Magic luego de ser eliminado por el equipo de Orlando en las Finales de Conferencia Este.
Pero lo peor de todo fue su explicación posterior.
"Soy un ganador", sentenció 'El Rey', "y mi espíritu competitivo no me permite felicitar a nadie que me haya derrotado".
Y yo pensé que era mal perdedor...
Ahora sus colegas se burlan de él. Kobe Bryant en su propia clínica, aseguró que "nadie le iba a volcar el balón en su cara". Y hasta el propio Chris Paul, ciudadano ilustre si los hay, apeló al sarcasmo al decir que "él había volcado el balón sobre LeBron y le habían negado la posibilidad de distribuir el video".
A James le gusta hacer alarde de sus éxitos, y no lo culpo porque a todos interiormente nos gusta.
Pero este es un mensaje para "El Elegido": Ya sabemos que eres grande LeBron, eres el mejor jugador de la NBA, y uno de los mejores talentos de la historia.
Así que por favor no arruines tu legado, porque eso es lo que lentamente estás haciendo con estas acciones infantiles.
Nada es irremediable, pero comienza a enderezar el barco Sr. Rey.
Porque en estos momentos más que una estrella de 2,03 de altura, veo a un niño muy chico que necesita una mejor guía.

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