RUSTENBURG -- México avanzó sin hacer méritos a octavos de final de la Copa Mundial de Sudáfrica, luego de perder 1-0 con el líder Uruguay, y dejó tan mal sabor de boca que parece imposible que pueda superar la siguiente ronda.El Tricolor de Javier Aguirre volvió a fallar ante el arco rival y volvió a cometer errores en balones largos, dos cosas que podrían costarle la eliminación cuando juegue los cuartos de final y en donde definitivamente no será favorito.
Uruguay, por su parte, jugó su partido. Se plantó en su terreno, espero atrás y cuando pudo lanzó un contragolpe hacia la punta que no desperdició y se llevó un merecido triunfo que lo clasifica como líder del Grupo A.
Y todavía se dio el lujo de perdonar en el tiempo de alargue en una jugada en donde había cuatro atacantes charrúas y sólo dos zagueros aztecas.
Javier Aguirre realizó su planteamiento más extraño. Fue contra la lógica. Quiso ser ofensivo en el arranque pero después perdió el orden y realizó ajustes que en vez de ayudar comprometieron el accionar de la selección mexicana.
Washington Tabárez, por su parte, no tuvo problema para ordenar a su conjunto. Supo plantear su partido con los mismos jugadores que golearon a Sudáfrica y repitieron la victoria.
UN NUEVO ROSTRO
México no quería el segundo lugar de grupo ni tampoco pactar un empate y eso se notó al dar a conocer las alineaciones, pues Aguirre decidió ir a la cancha con el 11 más ofensivo desde que abrió su participación en Sudáfrica.
Incluir a Andrés Guardado no era sorpresa, se le esperaba pese a que parece tener diferencias con Mario Carrillo y su sola presencia ya hacía un Tricolor más ofensivo, pero la mayor sorpresa del Vasco fue el ingreso de Cuauhtémoc Blanco de inicio.
Blanco salió a la cancha y con gafete de capitán, con lo cual México ganaba en orden y en toque de balón, aunque aparentemente perdía velocidad en la punta izquierda, sin embargo Guardado quedaba listo para ir por la espalda de Blanco.
Además de que en esa misma banda siempre quedaba solo Carlos Salcido para intentar la salida como lo hizo ante Francia y con ello también evitaba que Luis Suárez pudiera quedarse en la punta por Uruguay.
Aunque tanta gente al frente representaba un riesgo y al minuto seis Uruguay pudo capitalizarlo en una falla de Héctor Moreno al intentar controlar cerca del área pero le entregó el balón a Luis Suárez quien entró solo por la derecha, pero cruzó demasiado su disparo a segundo poste y perdió la oportunidad.
Luego del susto México intentó retomar el control de la media Cuauhtémoc jalando marca, desesperando rivales con su toque, recibiendo faltas.
Pero Uruguay también adelantó líneas y México debió aprovecharlo al minuto 17 en un largo servicio al área hacia el Guille Franco, quien recibió de espalda pero en vez de disparar se dio la vuelta para intentar acomodarse y perdió la oportunidad.
Franco hacía lento el ataque mexicano y además no realizaba labor de sacrificio, pues incluso retrasaba más sus líneas y Uruguay estuvo cerca de sorprender en el 21, en un mal rechace en la media cancha que Alvaro Pereira tomó y escapó por la izquierda y entró al área pero envió por fuera su disparo.
Guardado convirtió al Tri en un equipo más ofensivo y él pudo marcar la diferencia antes del 25 cuando mandó un potente disparo que reventó en el travesaño, en la más clara hasta ese momento del Tricolor. Aunque el balón siguió en el área, una vez más Franco fue incapaz de disparar al arco.
Giovani y Guardado intentaban llegar por los extremos, mientras Blanco se quedaba retrasado y el Guille sólo estorbaba en el centro pero no generaba peligro, ni jalaba marca, ni bajaba a cubrir.
Uruguay espero y conquistó el 1-0 en el minuto 43 en una jugada de dos toques de Edinson Cavani, quien se escapó por la derecha dejando lejos a Salcido y envió servicio a segundo poste en donde Luis Suárez entró completamente solo para rematar de cabeza y de frente al arco envió la pelota al fondo de las redes.
México no podía cometer errores y lo pagó caro, pues Suárez demostró que sí es un hombre de punta, que no perdona y cuando tuvo la oportunidad llegando por atrás a la espalda de Osorio no tuvo problema para concretar y poner con ventaja a Uruguay.
Cuauhtémoc dio todo lo que tenía en el primer tiempo y Aguirre falló en su pronóstico de abrir el marcador y después cuidar el resultado, así que para el segundo tiempo envió a Pablo Barrera de inicio para tener velocidad en la punta izquierda.
Sin embargo el Vasco dejó en el campo al Cuau y sacó a Guardado, quien había sido uno de los mejores hombres de la escuadra Azteca.
Uruguay ya no necesitaba ir al frente, así que se plantó en su terreno para agrupar gente y cortar cualquier ataque de los tricolores.
Los mexicanos se toparon con una línea de fondo y de ahí no pasaban por lo que Aguirre decidió hacer su segundo cambio al meter a Israel Castro por Héctor Moreno, en un cambio extraño, pues obligó a que Rafa Márquez se retrasara y aunque intentaba ganar velocidad en el medio campo perdía presencia en la recuperación.
Aguirre realizó el último ajuste con el ingreso del Chícharo por Cuauhtémoc y por primera vez México jugó con dos puntas para buscar una variante y sobre todo un servicio al área y un remate por alto, aunque los zagueros uruguayos no dejaban espacios.
Al 64 México acarició el empate en un servicio de Barrera desde la banda derecha hacia el centro del área para el Maza, quien se agregó al ataque y aunque se lanzó de palomita no alcanzó a rematar con la cabeza.
México intentaba por todos los medios posibles de llegar al arco rival y el anuncio de que Francia había anotado a Sudáfrica debería haberles dado más tranquilidad para bajar revoluciones al partido y dejar de chocar en corto con la zaga charrúa.
Uruguay se dedicó entonces a hacer tiempo a cuidar su ventaja, a ganar minutos en los tiros de esquina y a provocar desesperación en el cuadro azteca, pues incluso el Chicharito se ganó una amonestación al intentar quitarse la marca en un tiro de esquina.
México fue incapaz de superar el esquema uruguayo, un equipo que deja libertadores en su campo y que no perdona cuando tiene la oportunidad.
El Tricolor tuvo oportunidades en el primer tiempo pero desperdició y todavía en la recta final el Guille volvió a tener otro balón en el área pero se le alargó y no supo rematar. Desafortunadamente para la selección mexicana Franco no se ganó ni siquiera la tarjeta amarilla que le habría costado la suspensión para el próximo encuentro.
Incluir a Andrés Guardado no era sorpresa, se le esperaba pese a que parece tener diferencias con Mario Carrillo y su sola presencia ya hacía un Tricolor más ofensivo, pero la mayor sorpresa del Vasco fue el ingreso de Cuauhtémoc Blanco de inicio.
Blanco salió a la cancha y con gafete de capitán, con lo cual México ganaba en orden y en toque de balón, aunque aparentemente perdía velocidad en la punta izquierda, sin embargo Guardado quedaba listo para ir por la espalda de Blanco.
Además de que en esa misma banda siempre quedaba solo Carlos Salcido para intentar la salida como lo hizo ante Francia y con ello también evitaba que Luis Suárez pudiera quedarse en la punta por Uruguay.
Aunque tanta gente al frente representaba un riesgo y al minuto seis Uruguay pudo capitalizarlo en una falla de Héctor Moreno al intentar controlar cerca del área pero le entregó el balón a Luis Suárez quien entró solo por la derecha, pero cruzó demasiado su disparo a segundo poste y perdió la oportunidad.
Luego del susto México intentó retomar el control de la media Cuauhtémoc jalando marca, desesperando rivales con su toque, recibiendo faltas.
Pero Uruguay también adelantó líneas y México debió aprovecharlo al minuto 17 en un largo servicio al área hacia el Guille Franco, quien recibió de espalda pero en vez de disparar se dio la vuelta para intentar acomodarse y perdió la oportunidad.
Franco hacía lento el ataque mexicano y además no realizaba labor de sacrificio, pues incluso retrasaba más sus líneas y Uruguay estuvo cerca de sorprender en el 21, en un mal rechace en la media cancha que Alvaro Pereira tomó y escapó por la izquierda y entró al área pero envió por fuera su disparo.
Guardado convirtió al Tri en un equipo más ofensivo y él pudo marcar la diferencia antes del 25 cuando mandó un potente disparo que reventó en el travesaño, en la más clara hasta ese momento del Tricolor. Aunque el balón siguió en el área, una vez más Franco fue incapaz de disparar al arco.
Giovani y Guardado intentaban llegar por los extremos, mientras Blanco se quedaba retrasado y el Guille sólo estorbaba en el centro pero no generaba peligro, ni jalaba marca, ni bajaba a cubrir.
Uruguay espero y conquistó el 1-0 en el minuto 43 en una jugada de dos toques de Edinson Cavani, quien se escapó por la derecha dejando lejos a Salcido y envió servicio a segundo poste en donde Luis Suárez entró completamente solo para rematar de cabeza y de frente al arco envió la pelota al fondo de las redes.
México no podía cometer errores y lo pagó caro, pues Suárez demostró que sí es un hombre de punta, que no perdona y cuando tuvo la oportunidad llegando por atrás a la espalda de Osorio no tuvo problema para concretar y poner con ventaja a Uruguay.
Cuauhtémoc dio todo lo que tenía en el primer tiempo y Aguirre falló en su pronóstico de abrir el marcador y después cuidar el resultado, así que para el segundo tiempo envió a Pablo Barrera de inicio para tener velocidad en la punta izquierda.
Sin embargo el Vasco dejó en el campo al Cuau y sacó a Guardado, quien había sido uno de los mejores hombres de la escuadra Azteca.
Uruguay ya no necesitaba ir al frente, así que se plantó en su terreno para agrupar gente y cortar cualquier ataque de los tricolores.
Los mexicanos se toparon con una línea de fondo y de ahí no pasaban por lo que Aguirre decidió hacer su segundo cambio al meter a Israel Castro por Héctor Moreno, en un cambio extraño, pues obligó a que Rafa Márquez se retrasara y aunque intentaba ganar velocidad en el medio campo perdía presencia en la recuperación.
Aguirre realizó el último ajuste con el ingreso del Chícharo por Cuauhtémoc y por primera vez México jugó con dos puntas para buscar una variante y sobre todo un servicio al área y un remate por alto, aunque los zagueros uruguayos no dejaban espacios.
Al 64 México acarició el empate en un servicio de Barrera desde la banda derecha hacia el centro del área para el Maza, quien se agregó al ataque y aunque se lanzó de palomita no alcanzó a rematar con la cabeza.
México intentaba por todos los medios posibles de llegar al arco rival y el anuncio de que Francia había anotado a Sudáfrica debería haberles dado más tranquilidad para bajar revoluciones al partido y dejar de chocar en corto con la zaga charrúa.
Uruguay se dedicó entonces a hacer tiempo a cuidar su ventaja, a ganar minutos en los tiros de esquina y a provocar desesperación en el cuadro azteca, pues incluso el Chicharito se ganó una amonestación al intentar quitarse la marca en un tiro de esquina.
México fue incapaz de superar el esquema uruguayo, un equipo que deja libertadores en su campo y que no perdona cuando tiene la oportunidad.
El Tricolor tuvo oportunidades en el primer tiempo pero desperdició y todavía en la recta final el Guille volvió a tener otro balón en el área pero se le alargó y no supo rematar. Desafortunadamente para la selección mexicana Franco no se ganó ni siquiera la tarjeta amarilla que le habría costado la suspensión para el próximo encuentro.
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