Mourinho es el gran azote del Barça desde la última semifinal de la Champions y le gusta asumir ese papel. Hoy nos explica en AS cómo frenarles.
Mourinho es el gran azote del Barça desde la última semifinal de la Champions y le gusta asumir ese papel. Hoy nos explica en AS cómo frenarles.
Tanta inversión, casi 80 millones de euros, para empezar empatando mientras el Barça gana en Santander 0-3 entre aplausos
Lo diré muy alto para que se me entienda de una vez por todas. El Barça es un producto acabado, es una escuela de fútbol que vive de una estructura basada en Valdés, Puyol, Xavi, Iniesta y Messi que llevan veinte años en el Barça...¡Desde que nacieron! Un equipo que no tiene contradicciones en su proceso.
¿Merecen tanto elogio?
Tú miras el Barça de hoy, el de Rijkaard, el de Van Gaal o el de Cruyff y te puede gusta uno más que otro, pero la tendencia de juego no tiene contradicciones. El Barça es un producto acabado, lo que se llama un update. Tu tienes una aplicación en tu ordenador y metes un update. Y además también gasta y no poco. Son gente lista que vende la idea de que no gastan, que no compran jugadores, que todo sale sólo de la cantera Algunos se lo creen aunque no sea verdad. Yo estoy aquí para competir con un producto acabado.
La gente ve a Mourinho como alguien poco romántico para el fútbol? ¿Es usted demasiado defensivo?
¿Cuándo he sido defensivo? Argumentádmelo, por favor.
Hay aficionados que piensan que con usted el Madrid ganará por 1-0 y se conformará.
Les recuerdo que con 0-1 en Mallorca todos estaríamos ahora mucho más felices (sonríe). Se lo voy a aclarar. Mi Madrid siempre querrá ganar y jugar bien, pero también podemos empatar 0-0 en Mallorca y crear ocho ocasiones de gol. Mi Madrid jugará todos los partidos para ganar y siempre arriesgará para ganar. Que nadie lo dude. Mi Madrid no va tener miedo a perder. Nunca.
Su leyenda habla de una persona más fría y pragmática.
Pues lean los libros. Pero no sólo por los títulos que he ganado. Mi Chelsea fue el equipo con más goles en la historia de la Premier, hasta el año pasado lo superó el propio Chelsea. Además, fue el equipo con más victorias consecutivas de la Premiership. Mantiene ese récord. Esa es ante los ojos del mundo la Liga más emocional, ofensiva y apasionante. Y ahí dejé mi sello. Eso lo dicen los libros, no Mourinho.
Pero en la última Champions su Inter pareció jugar más al contragolpe.
No es verdad. En octavos nos cruzamos con el Chelsea y mi Inter ganó 0-1 en Stamford Bridge, que se quedó mudo porque pudimos meterles cuatro o cinco goles. En cuartos de final pudimos meter cinco al CSKA en Milán y en Moscú pasamos fácil. Nos tocó el Barça en semifinales y en San Siro les metimos tres goles y pudieron ser dos más...
¿Y en Barcelona?
En Barcelona jugamos con diez por la expulsión de Thiago Motta. Era un partido histórico para el Inter porque llevaba casi medio siglo sin ganar una Champions y sólo jugar la final ya era una hazaña. Con diez en el campo y defendiendo un 3-1, ¿qué queréis? Y les recuerdo que en la final del Bernabéu, desde el primer minuto, todos sabían ya que el Inter iba a ganar al Bayern. ¡Ja! Eso no te lo regala nadie.
El problema es que el Barça empuña la bandera del buen fútbol y a Guardiola se le ataca llamándole "filósofo", mientras que a usted le tildan de tipo duro. El madridismo cree en usted por eso. Lo ven como el azote del Barça.
Miren, yo sé cómo se juega contra el Barça. Lo sé de memoria. Once contra once. A veces es contra diez y ahí sé cómo sobrevivir ante ellos. Al Barça se le puede desactivar mandando con tu estilo. Si quieres jugar como ellos, pierdes. Eso lo tengo claro. Ellos quieren que los rivales intenten jugar igual porque ahí te matan, porque en ese estilo de juego son mejores individual y colectivamente. Yo me enfrenté tres veces a ellos en otras tantas eliminatorias. Les gané una con el Chelsea y perdí otra. Una tercera vez, en la que ya no estaba yo, todos vieron lo que pasó con el arbitraje del árbitro noruego. Por eso no jugaron la final. Y me medí otra vez, en esta ocasión con el Inter. Y les eliminamos.
Pero el año pasado, en la liguilla inicial, les mojaron la oreja.
Sí, porque fuimos al Camp Nou como angelitos, muy simpáticos y nos despedimos como chicos buenos. Casi nos meten tres o cuatro. Pero la segunda vez que fuimos allí ya tenían la bolsa preparada para viajar a la final del Bernabéu. Y ahí no fuimos simpáticos. Al revés, salimos todos mojados por los famosos aspersores de agua. Con el Barça no hay que ser simpático. Hay que desarmarles desde el minuto uno.
¿El próximo 28 de noviembre se irá el Madrid del Camp Nou también entre aspersores encendidos?
No lo sé, pero lo que digo es que si contra el Barça juegas como ellos, estás muerto. Si juegas como tú quieres, puedes ganarles.
¿Y cuál es el estilo futbolístico para ganar a este Barça?
Nosotros estamos buscando la fórmula. El Inter era un equipo muy trabajado, con dos años de labor que me permitieron hacer un Inter fuerte física y mentalmente. Mi Inter tuvo una fuerza mental bestial para medirse a un equipo que iba a tener el 70 por ciento de posesión. Para superar eso, hay que tener una organización táctica de hierro. Pese a sus rápidos movimientos sin balón, no pudieron destruir nuestra organización defensiva, que fue de hierro, insisto. Esto es táctico, físico y psicológico. El Inter estaba preparado parta todo.
¿Este Madrid es mejor que aquel Inter?
Si me preguntan si es mejor mi Inter o este Madrid, les digo que mi Inter. Pero yo trabajo para que en dos o tres meses pueda decir que mi Madrid es igual que mi Inter, y en cuatro o cinco meses espero decir que mi Madrid es mejor que mi Inter.
¿Y cómo logró superar al Barcelona?
Si tú construyes el juego para tutearle, no le llegas siquiera a su portería. Necesitas primero presionar arriba, pero si juegas en corto pierdes el balón en la zona medular y ahí ellos en veinte o treinta metros con Messi, Pedro, Iniesta, toc-toc-toc y ya está. Si tú les tuteas haces lo que ellos quieren que hagas para que caigas en su trampa.
¿Y cuál es la clave para eludir esa trampa?
Para que no te pillen con un balón perdido en primera fase, tienes que salir directamente de zona defensiva a segunda o tercera fase con un desplazamiento largo para sorprenderles. La presión de ellos en primera fase es terrible, porque si recuperan la pelota son muy rápidos y estás muerto. Un mal control, un mal pase o una mala recepción les facilitan una transición a 200 por hora y ya está liada. Sin embargo, en la construcción larga el Barça tiene muchos problemas.
Eso parece muy fácil decirlo
Lo que hay que hacer es no tener miedo y salir a buscarles a su medio campo. En San Siro jugamos directos desde el minuto uno. El primer balón en campo adversario con presión en todas las líneas. No les dejamos jugar el fútbol que les gusta. Estaban incómodos. El problema que hay ahora con el Barça es que muchos rivales les dan el juego que quieren. Todos los partidos son muy simpáticos, muy bonitos, todos se abrazan y parece un mundo perfecto. Pero claro, así acaban 3-1 o 4-0. Los rivales se dan cuenta siempre demasiado tarde de la trampa en la que han caído.
Y si tienen una mala noche, ya sabe que aquí han tenido arbitrajes generosos que hemos bautizado en España como Villarato. ¿Sabe lo que es?
Sería hipócrita si utilizase este argumento porque me faltan los datos suficientes para llegar a esa afirmación. Lo que sí es un dato contrastado es que muchas veces los adversarios del Barça terminan con diez. Demasiadas. Sólo en mi experiencia, en cuatro veces que me enfrenté a ellos mi equipo terminó con diez.
Hablemos de Cristiano. Se le ha visto con mucha ansiedad. Y encima se lesiona tras una fuerte entrada
Miren, Cristiano no tiene cultura de piscina, es un jugador de formación británica, formación Ferguson. Tiene fair play. No es un simulador. A Cristiano le pegan muy fuerte los rivales y veo que las tarjetas amarillas tardan mucho en llegar. Cristiano a mí no me tiene que demostrar nada porque lo que de verdad vale me lo demuestra todos los días en Valdebebas. Por un gol más o menos no voy a dudar de su calidad, que es incuestionable. No voy a dudar nunca de él. Su sentido de la responsabilidad le hace pensar sólo en ganar. A vosotros os parece ansiedad, pero para mí eso se llama tener sangre caliente durante un partido. Algunos jugadores no tienen sangre caliente ni fría, sólo agua. Si pudiera escoger, en mi equipo quiero al menos tres con sangre caliente, tres de sangre a su temperatura y el resto con sangre fría. Pero con agua no quiero ninguno.
¿Y Benzema tiene sangre fría o agua?
Benzema tiene la sangre muy fría. La tengo que calentar
El Milán da miedo con Robinho e Ibrahimovic.
La Champions está más complicada porque ahora son serios candidatos al título. El cuarteto formado por Robinho, Ibrahimovic, Ronaldinho y Pato es de los más fuertes del mundo. El Milán ha reunido grandes jugadores que se unen a su historia, cultura y tradición en la Copa de Europa.
¿Por qué no convenció a Raúl para que se quedase?
Cuando yo hablé con Raúl, su decisión ya estaba tomada. Fue una decisión de coraje, de un jugador que estaba convencido de que era lo mejor para todos. Raúl es un símbolo e historia del Real Madrid y pienso que volverá. No como jugador, pero Raúl tiene que volver aquí algún día...
No hay comentarios:
Publicar un comentario