Y los jugadores serán sancionados con faltas técnicas incluso si las acciones no fueran dirigidas hacia los árbitros.
La liga desea más respeto al deporte y a sus autoridades, y en consecuencia amplía la lista de las acciones antideportivas que serán objeto de castigo.
"¿Por qué hacemos esto? Simplemente queremos que todos sean corresponsables de la apariencia de nuestro deporte y de la imagen de nuestro deporte", dijo el viernes el vicepresidente ejecutivo de operaciones deportivas de la NBA, Stu Jackson, durante una conferencia telefónica de prensa. "Y enviar el mensaje de que queremos que las quejas de los jugadores sean minimizadas y que todos tengan respeto por el basquetbol".
Al parecer, el llamado a contener las quejas se origina también fuera de la liga.
"Nuestra investigación entre los aficionados muestra que la gente cree que los jugadores de la NBA se quejan demasiado y lo hace mucho más que los jugadores de otras ligas", expresó Jackson. "Pero haciendo eso a un lado, al revisar nuestros partidos, lo que hemos observado es un número excesivo de quejas hacia las decisiones y no decisiones de los árbitros".
Así que por segunda vez en cuatro años, la NBA advierte a los jugadores que podrían recibir más faltas técnicas si no paran las quejas desmedidas. La campaña de advertencia en la temporada 2006-2007 encendió una disputa con los jugadores, que finalmente presentaron una acusación de práctica laboral injusta ante la Junta Nacional de Relaciones Laborales.
Además de bombear el puño, también serían sancionadas acciones como manotear irrespetuosamente ante un árbitro, correr hacia un árbitro en la cancha, manotear o saltar en señal de incredulidad y aplaudirle con sarcasmo a un árbitro.
"Eso es bueno y malo", estimó el alero Michael Beasley de Minnesota. "Algunas veces debemos callarnos y jugar. Pero creo que en aras de los aficionados y de los televidente, (la expresión de quejas) es buena para que vean algo de emoción".
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