JOHANNESBURGO -- La FIFA no ha recibido ninguna información sobre la insinuación que el martes hizo el político italiano Umberto Bossi de que Italia iba a "comprar" el partido del jueves contra Eslovaquia, en la última jornada del grupo F del Mundial."No tenemos ninguna información sobre posibles intentos de comprar partidos", afirmó el portavoz de la FIFA, Pekka Odriozola, en su comparecencia diaria ante la prensa.
El líder de la federalista Liga Norte, Umberto Bossi, socio en el Gobierno de Silvio Berlusconi, arremetió este martes contra la selección italiana al insinuar que iban "comprar" el partido contra Eslovaquia.
Al ser preguntado por los periodistas por un pronóstico para el choque de esta primera fase del Mundial de Sudáfrica, Bossi aseguró: "Total, el partido lo compran. Veréis que en la próxima temporada habrá dos o tres jugadores eslovacos que juegan en equipos italianos".
Las palabras de Bossi levantaron las crítica de la Federación Italiana de Fútbol que a través de una nota expresó su malestar por las palabras del político y las tachó de "desconcertantes y ofensivas", mientras agregó: "Esta vez Bossi ha sobrepasado el límite".
Con estas declaraciones Bossi se suma a la posición expresada por algunos miembros de su partido, entre ellos su hijo y consejero de la formación, Renzo Bossi, que habían manifestado que no iban a apoyar a la selección italiana en el Mundial.
La Liga Norte aboga por la creación de un estado independiente formado por las regiones septentrionales de Italia.
BOSSI DICE QUE FUE UNA BROMA
El ministro italiano y líder del partido separatista Liga Norte, Umberto Bossi, aseguró que era "sólo una broma" la insinuación que hizo sobre que Italia iba a "comprar" el partido de mañana contra Eslovaquia, en la última jornada del grupo F del Mundial.
"Pido perdón a la selección italiana. Era sólo una broma y espero que la "Azzurra" gane el Mundial", afirmó Bossi, socio en el Gobierno del primer ministro, Silvio Berlusconi.
Bossi aclaró que esta frase la pronunció mientras estaba bromeando con algunos miembros de su partido en el restaurante de la Cámara de los diputados.
"Era sólo una broma mientras hablaba con mis hombres y mira el lío que se ha montado. Era sólo una de esas frases que se dicen cuando estás entre amigos hablando de fútbol", añadió.
"Total, el partido lo compran. Veréis que en la próxima temporada habrá dos o tres jugadores eslovacos que juegan en equipos italianos", dijo Bossi.
Las palabras de Bossi levantaron las críticas de la Federación Italiana de Fútbol que, a través de una nota, expresó su malestar por las palabras del político y las tachó de "desconcertantes y ofensivas", mientras agregó: "Esta vez Bossi ha sobrepasado el límite".
Con estas declaraciones Bossi se suma a la posición expresada por algunos miembros de su partido, entre ellos su hijo y consejero de la formación, Renzo Bossi, que habían manifestado que no iban a apoyar a la selección italiana en el Mundial.
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