Acortando distancias

-- El Real Madrid dejó de ser malo. Llega al Camp Nou con un leve crecimiento anímico que ha hecho acercar su nivel aparente al del Barcelona, aunque lo que ambos hicieran esta semana fuera alejado de un partido que sirva como medida. Para el Barcelona la Champions fue solo minutos para los jóvenes, para el Real Madrid fueron minutos para rejuvenecer conceptos.
Raúl y el Madrid resucitaron ante el Bate (AP)
La llegada de Juande hizo que se hablara bien del Real Madrid. Ahora el Barcelona ya no parece tan superior, porque del Barcelona nadie habló. Pero no dejó de ser, la semana previa al clásico, favorable para los intereses de Guardiola. Primero, el efecto "One--Day" Ramos trasladó la atención al campo blanco. ¿Cómo jugarán con Juande? Y jugarán como lo hicieron ante el Zenit, si el Barcelona fuera un equipo tímido y si el Real Madrid tuviera a Robben. Ni uno ni otro son escenarios reales.
Lo mejor para el Barcelona fue justamente el gran partido de Arjen Robben, cargado por la derecha y enganchando para la única, la zurda. Justo por el costado donde el Barcelona ha expuesto su punto mas flojo. Pero Robben no estará y el Zenit no dejó en el Bernabéu más que camisetas por cambiar. A Pep le salió todo bien esta semana, hasta recupera a Iniesta para la foto del último entrenamiento. Salvo perder los 600,000 euros que les quedaban por ingresar en la fase de grupos de la Champions, en la semana nada cambia para el Barcelona.
Juande Ramos ha dirigido un par de sesiones de entrenamiento, además de lo que fue el partido del miércoles. Habrá mimado y animado al plantel y tratará de fortalecer un concepto en particular: detener la profundidad del Barcelona. Algo qué, mas que virtud estética del juego de Guardiola, es una filosofía instalada y demostrada ya por los resultados.
Para Ramos la única duda es Ramos, Sergio Ramos. Como un agente secreto, Sergio Ramos es la clave. Si lo para como lateral derecho, jugará contra Henry y dejará a Metzelder y Cannavaro por el medio con Salgado, apoyado por Acci-Drenthe, para ser los Anti-Messi. ¿Si Ramos juega por la izquierda? Más volumen para tapar al mejor jugador del mundo. ¿Si Ramos juega de central? Metzelder enfrentaría a Tití, apoyado por el andaluz. La banda izquierda sería para Salgado con las ayudas de Drenthe y Cannavaro. Decide Juande, pero en función del rival y ya esto es contradictorio a la historia del Real Madrid. Pero el presente manda y el presente es flaco, con o sin Schuster.
Bien asesorados habrían estado Calderón y Mijatovic para tomar la decisión de destituir al Huracán Bernardo a cuatro días de la visita al Camp Nou. La distracción se va disipando y todo confluye de nuevo en lo primordial: el fútbol. Y eso no lo ha perdido el Barcelona.