LONDRES.- El fracaso del italiano Carlo Ancelotti al frente del Chelsea esta temporada recayó hoy sobre los hombros de un Fernando Torres que cada vez está sometido a mayor presión en Inglaterra.
El delantero español, fichado en enero al Liverpool por 50 millones de libras (72,5 millones de dólares), fue sustituido el martes en el descanso del duelo de vuelta de cuartos de final de la Liga de Campeones ante el Manchester United tras otra actuación discreta.
El marfileño Didier Drogba, que pese a estar lejos de su mejor forma ha ofrecido mucho más que Torres en las últimas semanas, entró en la segunda mitad y anotó el gol del Chelsea en la derrota por 2-1 en Old Trafford, donde los "blues" enterraron otra vez sus sueños de gloria en Europa.
"¿Fue un error alinear a Torres desde el principio?", preguntaron a Ancelotti tras el partido.
"Quizá. Puede ser. Pero prefería empezar con Fernando para este tipo de partidos", contestó el técnico italiano, que tras el doblete (Liga y Copa) logrado la temporada pasada, puede estar viviendo sus últimas semanas al frente del conjunto londinense tras un curso casi seguro en blanco.
"No estoy preocupado", dijo. "Tengo que seguir trabajando. No es mi decisión si me quedo aquí o no".
La decisión es del dueño del equipo, el multimillonario ruso Roman Abramovich, el hombre que puso el dinero para el espectacular fichaje de Torres y que vive obsesionado con levantar el trofeo de la Champions League.
Sin embargo, hasta el momento, el español no está respondiendo a la altura del reto.
Torres, que no ha recuperado el nivel que exhibió a su llegada a Inglaterra desde la operación de rodilla en 2010, aún no ha marcado con la camiseta del Chelsea.
Por eso, su presencia en el once titular ante el United empieza a interpretarse como una presión desde los despachos de Stamford Bridge.
"Mucha gente pensaba que jugaría Drogba", dijo el entrenador del Manchester United, Alex Ferguson. "Yo pensaba que habiendo fichado a Torres por el dinero que lo hicieron, tenían que jugar con él. No estaba seguro al cien por ciento, pero no veía cómo iban a dejarlo fuera".
"Tuvieron la oportunidad de ficharlo y no creo que nadie la hubiera rechazado", añadió el escocés. "No se puede criticar a Ancelotti por eso, fue un buen fichaje. Ahora no está funcionando, pero es joven y hay más temporadas por delante".
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